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La AFIP detectó que 114 empresas obtuvieron beneficios fiscales por 475 millones de pesos de forma fraudulenta, declarando domicilios ubicados en las provincias que cuentan con regímenes de promoción industrial “para aprovecharse de los beneficios impositivos, no desarrollando su actividad económica en esos territorios”, según indicó el organismo recaudador. La AFIP por ahora les reclama 368,1 millones de pesos que funcionaron como deducciones para las firmas, mientras que presentó 110 denuncias penales, en los casos en los que habría habido intencionalidad.

Las provincias con regímenes de promoción industrial son San Luis, San Juan, La Rioja y Catamarca y a través de este esquema buscan estimular las inversiones regionales y fomentar la utilización de mano de obra local. A cambio, reciben beneficios impositivos en el pago del IVA e Impuesto a las Ganancias. Para detectar las irregularidades, la AFIP analizó, en los legajos de las empresas, cuestiones como los signos de actividad productiva, fletes, cantidad y ubicación de proveedores, clientes, cadena de pagos y datos del personal empleado.

El 90 por ciento de las firmas que hacen uso del beneficio tienen filiales en las grandes ciudades, por lo que los allanamientos tendientes a buscar pruebas no se limitaron a la visita del galpón ubicado en alguna de las provincias adheridas a la promoción industrial. El operativo incluyó a zonas de Córdoba, Rosario, Buenos Aires y Capital Federal.

El estímulo fiscal es aprovechado por empresas de la industria química, plástica y fundamentalmente metalúrgica, rubro en el cual se inscribe casi la totalidad de las maniobras irregulares detectadas. La AFIP resaltó tres casos de empresas de ese sector que tienen declarado su domicilio en San Luis, en donde “sólo cuentan con galpones abandonados, máquinas en desuso e incluso en algún caso cedieron las instalaciones a terceros”. “Su verdadera actividad industrial la realizaban fuera de la provincia. Esta maniobra genera una competencia desleal con empresas no beneficiadas por la promoción”, agregó el organismo, que detalló que en esos tres casos se evadieron 97 millones de pesos.

En total son 114 empresas que cometieron irregularidades, solicitando de esa forma beneficios fiscales por 475 millones de pesos. De ese monto hay 368,1 millones que el organismo recaudador ya está reclamando “por ajustes impositivos ”. También encontró que en 110 casos se pudo haber tratado de fraude con dolo, por lo que se presentaron las denuncias penales correspondientes, por un monto de 212,6 millones de pesos. El operativo se suma a las investigaciones que la AFIP lleva adelante en diversos planos como por ejemplo el sector agropecuario, donde se busca detectar omisiones en las declaraciones de los granos.