El Ministerio de Economía rechaza la idea de que la crisis energética tendrá un costo elevado para las empresas, lo cual podría redundar en un menor crecimiento. El sector industrial “no está enfrentando restricciones para aumentar la producción”, sostienen en Economía, aunque admiten que la excepción es el sector petroquímico debido a su alta dependencia de fuentes energéticas. “Todos los análisis cuantitativos coinciden en que la industria no está enfrentando restricciones concretas para seguir incrementando la producción”, aseguraban ayer en el equipo de Felisa Miceli. Según un vocero del ministerio, “la industria actualmente está trabajando a un 75 por ciento de su capacidad instalada, lo cual deja un amplio margen para aumentar la producción”. Sin embargo, la misma fuente reconoció que “el análisis debe considerar los distintos modos de producción, como por ejemplo el comportamiento en procesos continuos. Este tipo de procesos se caracteriza porque gran parte del costo de producción está compuesto por costos fijos, de modo que el nivel de producción óptimo es usualmente el máximo de capacidad”, afirmó. Es el caso de la petroquímica, donde una parada de la producción por problemas energéticos puede implicar grandes costos.