En medio de negociaciones por la vicepresidencia demócrata, Hillary Clinton anunció que mañana se bajará de su candidatura y apoyará a Obama, informaron en la campaña de la senadora. Luego de que Barack Obama se autoproclamara el martes como candidato presidencial, la ex primera dama tuvo ayer conversaciones con el senador por Illinois, con quien se encontrará de nuevo la semana próxima. Aunque Clinton todavía no reconoció su derrota, después de sumar nuevos delegados en las elecciones del martes, ella y sus colaboradores dejaron saber que a la ex primera dama le interesaba la vicepresidencia.

Sin embargo, Barack Obama abrió la posibilidad de que otra persona ocupe el puesto que persigue Hillary al nombrar ayer un equipo de tres notables del partido para seleccionar un compañero de fórmula.

Perdido el plato fuerte, ahora la senadora demócrata va por su tajada. Después de dejar en claro en su acto del martes que cuenta con el respaldo de unos 18 millones de votantes, Clinton demostró que está lista para abandonar la campaña presidencial y comenzar una nueva campaña: convertir su capital político en concesiones tangibles de su rival en la interna. “La senadora Clinton celebrará un evento en Washington el viernes en el que dará las gracias a sus partidarios y expresará su apoyo al senador Obama y a la unidad del partido”, informó un comunicado de su campaña.

El anuncio de su concesión fue conocido anoche después de que la ex primera dama estadounidense mantuviera conversaciones con varios miembros del Congreso que le habrían recomendado retirarse de escena, de acuerdo con el diario The New York Times. Frente a las presiones, la política de 60 años declaró en una videoconferencia que le avisó a la mayoría de los empleados de su campaña que a partir de mañana se quedaran en sus casas, señaló la cadena televisiva ABC citando fuentes del Partido Demócrata.

Pero públicamente, Hillary no hizo ningún comentario más que elogiar a quien hasta hace poco era su rival acérrimo. “Permítanme ser bien clara. Sé que el senador Obama será un buen amigo de Israel”, dijo ante la Aipac, una de las principales organizaciones judías con sede en Estados Unidos, delante del virtual candidato presidencial demócrata.

Mientras tanto, los colaboradores de Hillary ayer pusieron en marcha la campaña tras bastidores de Clinton por la candidatura vicepresidencial. “Creo que a muchos de sus partidarios les gustaría verla en la boleta (como compañera de fórmula de Obama)”, dijo el jefe de campaña de Clinton, Terry McAuliffe.

Con el operativo clamor en marcha, el magnate negro de la televisión estadounidense Robert Johnson, fundador del canal de cable BET, escribió ayer una carta al congresista James Clyburn urgiéndolo a usar su influencia para convencer a Obama de que elija a su antigua rival en el interés de la unidad del partido. “Ella está interesada en la vicepresidencia, lo desea realmente. La pregunta es si Obama lo desea realmente”, dijo Johnson al diario The Washington Post.

Consultado al respecto, el senador de Illinois contestó ni. “Acabo de hablar con ella, y vamos a tener una conversación en las próximas semanas. Y confío mucho en cuán unificado estará el Partido Demócrata para ganar en noviembre” (para las elecciones generales), declaró a la salida del Senado, según informó la cadena de noticias CNN.

Los periodistas intentaron tirarle de la lengua para saber si la senadora sería la copiloto de la fórmula demócrata, pero no hubo caso. “No fue una conversación en detalle. Como dije, confío mucho en que vamos a ser capaces de unir al partido”, respondió Obama.

Para ganar un poco de oxígeno y contraponer figuras de peso al poder simbólico del matrimonio Clinton, Obama anunció la formación de un equipo de búsqueda para la candidatura vicepresidencial integrado por Caroline Kennedy, la única hija viva de John F. Kennedy. Los otros dos miembros del equipo son el ex número dos del Departamento de Justicia Eric Holder y el ex presidente de la firma hipotecaria semiestatal Fannie Mae, Jim Johnson.

Hillary no sería la única interesada en el segundo lugar de la fórmula demócrata. El gobernador de Nueva México Bill Richardson y el senador de Carolina del Norte John Edwards integran la lista corta.

Pero los voceros de Obama tuvieron que reconocer que después de una campaña tan reñida cualquier búsqueda debe comenzar con la senadora de Nueva York. “No hay ningún acuerdo en marcha con Hillary Clinton”, dijo Robert Gibbs, vocero de Obama. “Pero cuando el polvo se disipe y cuando ella lo crea conveniente, él se reunirá (con Clinton) donde ella quiera. Ella acumuló muchos votos por todo el país. Queremos dejar en claro que apelamos a sus votantes.”