El presidente electo estadounidense, Barack Obama, anunció ayer la creación de un grupo de trabajo, dirigido por el vicepresidente electo, Joe Biden, para ayudar a las familias de clase media afectadas por la crisis económica. “Mi administración se dedicará totalmente al futuro de la clase media y de las familias que trabajan –declaró Obama en un comunicado–. Estarán en el centro de nuestra gestión cada día. Este grupo de trabajo será un vehículo que utilizaremos para garantizar que nunca olvidemos ese compromiso”, agregó.

Obama prevé reunir responsables de alto nivel para elaborar proyectos con el objetivo de mejorar las condiciones de vida de las familias confrontadas con el aumento del desempleo, la crisis inmobiliaria y la escasez de crédito. El grupo, según Nick Shapiro, portavoz del equipo de transición de Obama, tendrá como metas la conciliación del trabajo y la vida familiar; la protección de los ingresos de las familias medias y la expansión de las oportunidades educativas. El costo total de la iniciativa rondará los 700.000 millones de dólares.

El programa, que funcionarios del equipo de transición abordaron esta semana con representantes del Congreso, prevé fomentar el empleo mediante la inversión en infraestructura, nuevas tecnologías y energías alternativas, y contará con una serie de mecanismos para garantizar que sus fondos se usan de manera efectiva y transparente, aseguraron las fuentes. Es por ello que, cargado de optimismo, el presidente electo ha aumentado a tres millones los puestos de trabajo que se propone crear o mantener.

Obama, que se encuentra en Hawai para pasar las vacaciones navideñas antes de tomar posesión del cargo, el 20 de enero, se había fijado inicialmente la meta de crear 2,5 millones de puestos de trabajo, según había anunciado el mes pasado. Sin embargo, de acuerdo con fuentes demócratas, tras participar en una sesión informativa el pasado martes acerca de la situación de la economía estadounidense, la cifra aumentó, al concluirse que la recesión actual va a ser peor de lo que se creía.

A lo largo de 2009 se perderán cerca de cuatro millones de empleos en EE.UU., según esas predicciones, y el índice de desempleo puede llegar a rondar el 9 por ciento de la población activa, frente al 6,7 por ciento actual. En virtud de ello, Obama instó a sus asesores a pensar con “osadía” posibles soluciones.

El grupo de trabajo dirigido por Joe Biden estará compuesto por los secretarios de Salud, Educación y Trabajo; sus tareas comenzarán una vez entrada en funciones la nueva administración, el próximo 20 de enero. “El presidente electo y yo sabemos que las condiciones económicas de las familias que trabajan se han erosionado y esperamos cambiar esa situación”, dijo Biden ante la prensa. “Voy a presidir ese grupo que se encargará de que usemos criterios para medir el éxito de nuestra administración en materia económica: ¿la clase media se beneficia del crecimiento? ¿La clase media ha dejado de estar abandonada?”, declaró ayer el vicepresidente electo a la cadena ABC.

El grupo de trabajo publicará en Internet un informe anual sobre sus descubrimientos y recomendaciones, indicó el equipo de Obama.