EL MUNDO › INTOXICACIONES MASIVAS EN TRES BARCOS EN EE.UU.
Del ántrax a los cruceros
Tres intoxicaciones masivas en tres cruceros de distintas compañías en tan sólo una semana: suficiente para suponer que se trata de un atentado terrorista. Las autoridades norteamericanas comenzaron ayer a investigar qué pasó en el crucero “Fascination”, que debió regresar a Miami luego de tres días de navegación con cien pasajeros “afectados por una violenta descompostura intestinal”, según informó el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) estadounidense. La agencia indicó que los pasajeros sufrieron una intoxicación por causa de un virus, aunque personal del CDC se encontraba a bordo de la nave para realizar un “análisis profundo”, aunque “no se descarta” la posibilidad de un atentado.
El caso del “Fascination” se suma al crucero “Amsterdam”, de Holland America y a la nave “Magic”, de la Disney Cruise Line, compañías cuyos pasajeros sufrieron en los últimos días intoxicaciones por virus intestinales. El sábado pasado, la nave “Magic” de Disney debió retornar de urgencia por segunda vez al puerto cerca de Orlando, Florida, con 195 pasajeros y 23 tripulantes enfermos, luego de que el barco fuera desinfectado tras un primer contingente de turistas intoxicados. Por este motivo, la empresa Disney decidió suspender una próxima salida de la nave, en la que iba a realizar una visita al Caribe de aproximadamente una semana.
Los investigadores del CDC establecieron que se trató del mismo virus en todos los casos, pero además indicaron que se transmite de persona a persona, por lo que la desinfección de los barcos no es suficiente y debe someterse a tratamiento a toda la tripulación. Sin embargo, esto no impidió que ayer por la mañana zarpara de un puerto de Florida el “Amsterdam”, en una travesía que fue suspendida la semana pasada luego de que 500 personas se enfermaron repentinamente. El otro dato que une todos los casos es que son cruceros que partieron de Florida.
Las autoridades de salud estadounidenses están en estado de alerta máxima desde los casos de ántrax detectados tras los ataques del 11 de septiembre. Pero, además, por el hecho de que los últimos blancos de la red Al Qaida de Osama bin Laden fueron contra turistas: primero en Bali, Indonesia, y la semana pasada en el atentado antiisraelí en Kenia.