Desde Medellín

Este miércoles será liberado el periodista francés Romeo Langlois, según anunció la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que lo secuestraron hace un mes, al sur de Colombia, mientras registraba una misión antinarcóticos. En un comunicado divulgado en Internet y firmado por el Frente XVI, el grupo rebelde dice que “las coordenadas del sitio donde será liberado el señor Langlois serán entregadas oportunamente a la misión humanitaria integrada por el CICR, Piedad Córdoba y el delegado francés”.

En la tarde de ayer, el Comité Internacional de la Cruz, así como delegados del colectivo Colombianos y Colombianas por la Paz y uno más del gobierno francés, se reunieron para acordar los pasos a seguir. “Nos declaramos a la expectativa en torno de la divulgación de los protocolos de seguridad indispensables para el éxito de la operación. Todos los protagonistas de esta liberación deben ser rodeados de garantías ciertas para su integridad física”, añadieron las FARC en su comunicado de tres puntos.

Langlois quedó en medio del fuego cruzado entre la fuerza pública y la guerrilla, en el departamento de Caquetá, y, según declararon militares, se quitó el casco y el chaleco ofrecidos por aquéllos para su protección, al tiempo que se entregó a los rebeldes anunciando que era civil y periodista. Estaba ya herido en un brazo y los guerrilleros, entonces, lo capturaron y declararon “prisionero de guerra”, lo que provocó fuerte rechazo a nivel mundial. Más tarde, esa guerrilla, la más vieja del mundo, que tiene el secuestro como una de sus más recurrentes prácticas de guerra, confirmó que el comunicador estaba en su poder y pusieron como requisito su liberación a un debate nacional sobre el papel de la prensa en el cubrimiento del conflicto armado. Algunos medios y periodistas independientes en la capital utilizaron los medios masivos y aulas universitarias para tratar el tema, condenando a la guerrilla por condicionar la libertad de un periodista, que ejercía un auténtico trabajo de reportero y civil en zona de combate, a una discusión nacional. Que en Colombia no hay seguridad ni garantías para el cubrimiento profundo del conflicto armado y que la libertad de prensa es cada vez más aporreada, fueron algunas de las conclusiones de los encuentros.

Por su parte, organizaciones civiles como indígenas del sur del país, a quien Romeo documentó en un amplio reportaje audiovisual, manifestaron su rechazo, al que se unieron diversas voces que desde entonces exigen a la guerrilla que le den libertad inmediata. Al fin, los insurgentes determinaron entregar el comunicador a una misión encabezada por la ex senadora liberal Piedad Córdoba, quien ha liderado los procesos humanitarios en los últimos años para que la guerrilla entregue de forma unilateral a decenas de policías, militares y civiles en su poder en las selvas del país. Tras la más reciente liberación, en febrero, las FARC se habían comprometido a no volver a secuestrar.

Al conocer el anuncio de la fecha de liberación, Córdoba se declaró contenta y complacida por la “buena voluntad” de la guerrilla, así como del gobierno de Francia, al que la misma guerrilla convocó a participar del comité que logre la liberación de Romeo Langlois, de 37 años, reconocido entre sus colegas por su trabajo imparcial y profundo, que retrata los efectos de la guerra en Colombia, en especial en la población civil.

Aún se desconoce el sitio de la liberación, aunque, según declaró Piedad Córdoba a la radio, es probable que el procedimiento sea parecido a las liberaciones anteriores, cuando, desde una ciudad capital pequeña, la misión humanitaria se desplaza hasta el sitio de las coordenadas exactas selva adentro. “No tengo la menor idea de qué municipio es”, dijo la política desde México, preparando su regreso a Bogotá para coordinar junto al Ministerio de Defensa los detalles.