El secretario general de Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), Ernesto Samper, dijo que su organización busca actuar con “prudencia y diplomacia” frente a la reciente detención del alcalde de Caracas, Antonio Ledezma. En una entrevista al diario El Tiempo, Samper dijo que el papel de Unasur “no es atizar incendios sino apagarlos... Nuestra tarea consiste en buscar canales discretos y efectivos para que las cosas se arreglen o se mejoren a través del diálogo entre los actores de la crisis”.

Samper, quien fue presidente de Colombia (1994-1998), señaló que el telón de fondo de la tensión política venezolana es la situación económica y bregó por el diálogo entre el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición. “Esta crisis no se la inventó el presidente Maduro; si él no hubiera sido electo, le hubiera llegado a quien estuviera en este momento en el gobierno. Lo que importa es que los actores políticos, sociales y económicos de Venezuela acuerden rápido un manejo social de la economía. Para conseguirlo tienen que dialogar y sentarse en la misma mesa.” Venezuela, con las mayores reservas petroleras del mundo, acumula tres trimestres en recesión, una escasez de un tercio de los productos básicos y una inflación de 64 por ciento en 2014.

Consultado acerca de si cree que existe una conspiración internacional para derrocar al gobierno bolivariano, Samper recordó que Venezuela presentó pruebas sobre intentos desestabilizadores en la última reunión del bloque en Montevideo. “El gobierno de Venezuela presentó evidencias sobre actividades injerencistas internacionales que preocuparon y alarmaron a algunos de los asistentes. Le confieso que yo aún no entiendo cómo Estados Unidos borra con el codo del unilateralismo en Venezuela lo que está haciendo con la mano tendida en Cuba.”

El pasado jueves el servicio de inteligencia venezolano detuvo al alcalde mayor de Caracas, Antonio Ledezma, a pocos días de haberse cumplido un año del encarcelamiento del opositor Leopoldo López y de las protestas que desencadenaron una crisis política en ese país. Ledezma fue imputado por los cargos de conspiración y asociación para el delito y recluido en la cárcel militar de Ramo Verde.

Sobre las detenciones Samper dijo que Unasur “defiende principios como el de la aplicación de las reglas universales que definen el derecho al debido proceso y la independencia de los jueces para cumplir su misión”.

El secretario general del bloque sudamericano anunció el pasado viernes que los cancilleres del organismo celebrarán una reunión extraordinaria, en una fecha aún no fijada, para analizar el situación venezolana tras la detención de Ledezma. Antes de esa reunión, la próxima semana, viajarán a Caracas los ministros de Exteriores de Brasil, Colombia y Ecuador para reunirse con diversos actores políticos locales.

En ese contexto, el gobierno de Chile manifestó ayer su esperanza de que los países del bloque puedan contribuir a apaciguar la tensa situación que hay el vecino país. “A Chile le interesaría que los cancilleres de la Unasur pudiesen jugar un papel en el conflicto”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores chileno, Heraldo Muñoz.