La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, firmó el jueves un indulto navideño que beneficia a un importante número de presos, y puede alcanzar a José Dirceu, del Partido de los Trabajadores, el ex hombre fuerte del gabinete durante el primer gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.

El Diario Oficial de la Unión (Boletín Oficial) publicó anteayer el indulto navideño que alcanza a presos que purguen condenas de hasta 8 años, como es el caso de Dirceu, condenado por su participación en la red de corrupción del “Mensalao”, a detenidas que sean madres de hijos menores de 18 años afectados por graves enfermedades.

Entre las personas beneficiadas por el indulto presidencial también están los presos parapléjicos y ciegos que hayan contraído esas dolencias luego de ser condenados y siempre que estén avalados por informes de médicos del Poder Judicial. También entre los que reciben el beneficio están quienes al día de hoy hayan completado un tercio de su condena, si no son reincidentes; los condenados por período de más de ocho años que ayer (25 de diciembre) hayan cumplido 60 años y completado un tercio de su condena, si no son reincidentes; así como los condenados que tienen 70 años y han cumplido un cuarto de castigo si no son reincidentes. En el decreto se aclaró que no podrán gozar de este beneficio del indulto navideño quienes hayan sido condenados por tortura, terrorismo o tráfico de drogas.

El Supremo Tribunal Federal (STF, Corte) consideró que Dirceu fue el “jefe de la asociación ilícita” que comandó el Mensalao (mensualidad), término como se popularizó el pago de sobornos mensuales a diputados para que voten leyes respaldadas por el Poder Ejecutivo. Según la Agencia Globo y el sitio de noticias del diario Folha, este indulto navideño de Rousseff reúne los requisitos para que Dirceu recupere la libertad. Previamente sus abogados deberán presentar una requisitoria ante el ministro Roberto Barroso, del Supremo Tribunal Federal.

Dirceu fue jefe de gabinete de Lula hasta 2005 cuando estalló el Mensalao por el cual debió renunciar mientras cayó toda la cúpula del PT.

Con la firma del decreto de indulto navideño de la presidenta, los defensas de dos condenados en el Mensalao, como Dirceu y el ex tesorero del PT Delúbio Soares, se preparan para requerir al Supremo Tribunal Federal (STF), el perdón a las penas aplicadas a sus clientes.

De acuerdo con las reglas del indulto, el beneficiado queda libre de cumplir el resto de la pena o de otras medidas judiciales, como presentarse ante la Justicia periódicamente. El indulto está previsto en la Constitución y tradicionalmente concedido por el presidente de la República en Navidad y tiene en consideración criterios que están prestablecidos por el Consejo Nacional de Política Criminal y Penitenciaria, ligado al ministerio de Justicia.

La concesión del beneficio no es automática. Los abogados de cada uno de los condenados tiene que pedir el perdón de la pena a la Justicia. En el caso Mensalao, el ministro supremo Luis Roberto Barroso, relator de los ejecuciones de las penas del caso, analizará si los requisitos se cumplen. Dirceu fue condenado en el mensalao a 7 años y 11 meses de prisión y cumplía prisión domiciliaria cuando terminó preso nuevamente por pedido de la Justicia por supuesta participación en el esquema de desvío de recursos en Petrobras. El petista todavía no fue condenado en este caso, que aguarda la sentencia de juez Sergio Moro, y por lo tanto no es considerado reincidente. Según el abogado del ex ministro, José Luis de Oliveira Lima, el pedido de extinción de pena debe ser presentado en el STF a comienzos de 2016.

Con una población carcelaria de más de 600.000 reclusos, el sistema penitenciario brasileño enfrenta un colapso debido a la “endémica superpoblación”, según un informes elaborado por Naciones Unidas en 2014.