EL MUNDO › EL PRESIDENTE PRO RUSO FUE A PEDIR AYUDA A SU MEJOR ALIADO
Una visita de Ucrania al zar Putin
El presidente ruso, Vladimir Putin, descartó una repetición de las elecciones ucranianas, marcadas por múltiples denuncias de fraude.
Por Askold Krushelnycky *
Desde Kiev
El presidente de Ucrania, Leonid Kuchma, voló ayer para consultar con su contraparte rusa, Vladimir Putin, en lo que sus enemigos dijeron que era una prueba de que Moscú le está dando instrucciones al líder saliente. Y en una movida polémica, Putin sugirió que una repetición de la peleada elección presidencial no lograría mucho. Afirmó: “No conozco un solo país cuyas leyes permitan tal repetición”. Los líderes de la oposición han dicho que las amenazas para dividir a Ucrania surgían del Kremlin. Pero Putin dijo: “Estamos muy preocupados sobre todo lo que sugiera una tendencia a la división del país”. Y caracterizó a Ucrania como una parte indivisible de la “fraternal” esfera de influencia de Rusia. Putin agregó: “Hemos vivido tanto tiempo en un país y en nuestros corazones no dividimos a Ucrania en norte, sur u oeste”. La oposición dijo que el viaje de Kuchma a Moscú mostraba quién estaba tratando de manipular la situación.
Kuchma ha oscilado entre apoyar nuevas elecciones e insistir en que Yanukovich sea confirmado como presidente. Se mostró convencido de que Rusia debe ser parte de la solución de la turbulencia política que se ha apoderado del país desde hace 12 días, y afirmó: “Sin los esfuerzos de Rusia, es imposible encontrar la forma de superar la crisis política; de lo contrario Ucrania podría perder su imagen”. La Corte Suprema del país siguió con las audiencias anoche hasta tarde, tratando de decidir si anula o no los resultados de las elecciones del 21 de noviembre que enfrentaron al primer ministro del gobierno pro ruso, Viktor Yanukovich, y al líder opositor pro occidental Viktor Yuschenko. Si la Corte Suprema falla a favor de las denuncias de la oposición de que las elecciones estuvieron arregladas, es probable que ordene una nueva votación. El representante de política exterior de la Unión Europea, Javier Solana, llevó ayer a otros mediadores occidentales a conversar con todas las partes, pero no pudo lograr una salida el embrollo político, que muchos temen que pueda derivar en un derramamiento de sangre.
Kuchma dejó la mayor crisis durante sus 10 años de presidencia para volar a Moscú a reunirse con Putin. El presidente nominó y apoyó al primer ministro pro ruso en su postulación a la presidencia. Putin visitó Ucrania dos veces en las vísperas de ambas vueltas de las elecciones presidenciales para apoyar a Yanukovich, que quiere que Ucrania sea parte de un nuevo bloque económico conducido por Rusia y cautivó a la gran minoría étnica rusa para lograr sus votos.
A lo largo de la crisis, Kuchma, que nunca tuvo fama por su coraje, trató de ignorar las exigencias de los manifestantes y dejó en claro que, si puede, todavía quiere pasarle el poder a Yanukovich. Durante el fin de semana, políticos clave en Ucrania oriental hicieron surgir el espectro del separatismo y la posible guerra civil si Yushchenko llega a presidente. Esos políticos son aliados de Kuchma y de Yanukovich. En su reunión con Putin, el presidente ucraniano, que castigó sólo débilmente a los separatistas, se quejó de que Ucrania ahora estuviera dividida.
Yushchenko se manifestó escéptico de que la visita ayude a resolver la crisis. Afirmó: “Me gustaría, hasta donde sea posible, separar los asuntos políticos internos de Ucrania tanto del este como del oeste. Creo que el pueblo y los votantes de Ucrania saben que la presión externa fue usada la víspera de la elección para influenciar los resultados. La fuente del gobierno debe ser el pueblo y esa fuente está aquí en Ucrania, no en el exterior”. La oposición dijo que los conversaciones con el gobierno se reanudarían después de que la Corte Suprema produjera su decisión, posiblemente hoy. Sin embargo, el fallo de la Corte se esperaba ya para el lunes último, y ha venido posponiéndose de día en día desde entonces. Una posibilidad es que la Corte esté esperando ver para dónde sopla el viento político antes de inclinarse por un candidato o por otro; también es posible que la Corte, constituida en los años de la presidencia de Kuchma, esté colaborando con los seguidores de Yanukovich en un plan de dilacionessistemáticas destinado a erosionar la voluntad de los manifestantes movilizados y provocar así lentamente el final de las protestas en las calles.
Decenas de miles de partidarios de la oposición seguían anoche ocupando el centro de la capital y rodeando los edificios claves del gobierno. La Comisión Electoral Central dio la victoria a Yanukovich por un escaso margen. Pero eso provocó masivas manifestaciones por parte de los partidarios de la oposición, que han tomado el control de la capital, Kiev, y otras ciudades ucranianas, denunciando que el candidato del régimen ganó porque hubo fraude en gran escala, sobornos, intimidación y falsificación. La Unión Europea, Estados Unidos y otros monitores electorales occidentales apoyaron las acusaciones de fraude de la oposición.
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Celita Doyhambéhère