El presidente de Francia, Nicolás Sarkozy, interviene cada vez más en el proceso de paz entre el gobierno de Colombia y las FARC para canjear rehenes por presos rebeldes. El mandatario francés se reunirá hoy por este tema con su colega colombiano, Alvaro Uribe, y en noviembre con su par venezolano, Hugo Chávez, a quien lo respaldó nuevamente. Asimismo, la senadora colombiana opositora Piedad Córdoba, facilitadora del canje humanitario, participará de la reunión que hoy Chávez tiene prevista con familiares de tres estadounidenses en manos de la guerrilla colombiana.

“La obsesión de Francia es que Ingrid Betancourt sea devuelta sana y cuanto antes a su familia en el plazo más breve posible”, señaló. Sarkozy se encontrará con Uribe en Nueva York, en el marco de la Asamblea General de las Naciones Unidas, según informó el diario bogotano El Tiempo. En una muestra de interés por el conflicto colombiano, el mandatario francés reveló que el domingo se reunió con Melanie, la hija de la ex candidata a la presidencia colombiana Ingrid Betancourt, secuestrada por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en 2002 y desde entonces en poder de esa organización. El caso de Betancourt generó la preocupación del gobierno de Francia y el involucramiento de Sarkozy, quien también ofreció su mediación, debido a que la ex candidata secuestrada tiene doble nacionalidad, colombiana y francesa.

Por otra parte, Sarkozy ayer dio la bienvenida a las gestiones de su homólogo de Venezuela para buscar la liberación de los secuestrados en poder de la guerrilla colombiana. “Su intermediación es bienvenida”, dijo Sarkozy al término de la primera ronda de reuniones sobre el cambio climático que se desarrollan en la sede de Naciones Unidas. El presidente francés subrayó el contacto que venía teniendo con el líder bolivariano. “En las últimas semanas he hablado con Chávez tres o cuatro veces por teléfono”, aseguró, en referencia al intercambio humanitario en Colombia. Asimismo recordó que ha invitado al presidente de Venezuela a visitar su país. “Chávez visitará Francia en noviembre”, indicó.

En tanto, asesores de la parlamentaria colombiana dijeron ayer que Córdoba viajará a Caracas para reunirse hoy con Chávez y con miembros de las familias de los tres contratistas estadounidenses secuestrados por las FARC en 2003. Keith Stansell, Thomas Howes y Marc Gonsalves fueron secuestrados en febrero de ese año tras accidentarse la avioneta en la que viajaban por las selvas del Caqueta (suroeste de Colombia). Los tres estadounidenses estaban recogiendo información sobre cultivos ilegales para la empresa California Microwave Systems, contratista del Departamento de Defensa de EE.UU., pero las FARC los acusaron de ser espías de la Agencia Central de Información (CIA).

Después las FARC incluyeron a los tres extranjeros en la lista de personas que aspiran a intercambiar por 500 guerrilleros presos, pero para ello se requiere un acuerdo humanitario que aún no se ha podido lograr. Ahora los parientes de los estadounidenses quieren hablar el jueves en Nueva York con el presidente Uribe, quien viajará a esa ciudad de EE.UU. para participar en la asamblea de la ONU.

Por su parte, el gobierno de Colombia reiteró el domingo su apoyo a las gestiones de la senadora y del mandatario de Venezuela en pro de lograr ese acuerdo. El anuncio se hizo luego de que la congresista Córdoba se reuniera el mismo día en Bogotá con el alto comisionado para la Paz, Luis Carlos Restrepo, a quien le manifestó su malestar. “Existen enemigos agazapados de la paz que con declaraciones altisonantes perjudican el proceso que se adelanta con las FARC”, dijo Córdoba.