Aunque no fue oficialmente confirmada, la noticia causó gran revuelo en Francia: a escasos tres meses de su separación de Cecilia, el presidente Nicolas Sarkozy ya habría contraído matrimonio con la cantante y modelo italiana Carla Bruni, informó ayer el diario L’Est Republicain. La unión se celebró en el Palacio del Elíseo, según señaló el diario en su página web, en base a declaraciones de una persona que conoce a un testigo de la supuesta boda. Por el momento, el Elíseo no se ha manifestado al respecto.

Para Sarkozy, de 52 años, se trata de su tercer matrimonio. La ex modelo, de 39 años, estuvo casada anteriormente con el intelectual Raphael Enthoven, de quien tiene un hijo de seis años. Además se le atribuyen numerosas relaciones sentimentales con famosos, entre ellos los rockeros Eric Clapton y Mick Jagger, el multimillonario Donald Trump y el actor Kevin Costner. La cantante dijo en una entrevista que no está hecha para la vida en pareja y que ocasionalmente se inclina por la poligamia.

Sarkozy –recientemente divorciado de su segunda mujer, Cecilia– reconoció hace pocos días de forma oficial su relación con Bruni ante cientos de periodistas, tras pasar con ella unas vacaciones. “Es algo serio”, dijo entonces al ser interrogado sobre sus planes de matrimonio. “Es muy posible que lo sepan cuando ya haya sucedido”, agregó mostrando su dedo para subrayar la ausencia de una nueva alianza.

No obstante los rumores, Marisa Bruni-Tedeschi, la madre de Carla, afirma no estar al corriente a pesar de haber estado con su hija momentos antes. El portavoz del Elíseo –David Martinon– y Franck Louvrier –responsable del servicio de prensa de la presidencia– declararon no tener “ningún comentario” que hacer al respecto.

De confirmarse la información, la ex modelo y cantante podría, sin problema alguno, acompañar a Nicolas Sarkozy el 24 de enero en su viaje oficial a la India sin que sea necesario modificar el protocolo, y los recién casados podrían gozar de un viaje de novios de cuentos de hadas, al país de los marajás, fotografiándose delante del mítico Taj Mahal.

Mientras tanto, en Francia aparecieron casi al mismo tiempo tres libros sobre la ex esposa de Sarkozy. Cecilia hizo todo lo posible por evitar la publicación de uno de ellos, en el que según la autora acusa a su ex marido de tacaño y mujeriego.