EL MUNDO › EL PRESIDENTE SALIENTE VATICINO "UNA CATASTROFE"
El espectro de dos Ucranias
Por Andrew Osborn *
Desde Kiev
Ucrania estaba en peligro de dividirse en dos países anoche, luego de que varios líderes regionales del rusófilo este del país anunciaron que preferirían formar un nuevo Estado antes que ser gobernados por el prooccidental Viktor Yuschenko, el líder de la llamada Revolución Naranja. La explosiva noticia se conoció cuando Leonida Kuchma, el saliente presidente de Ucrania, dijo que las negociaciones para sacar al país de la actual crisis iban de mal en peor y que el rival presidencial de Yuschenko, el pro-ruso Viktor Yanukovich, advirtió que Ucrania está “al borde de una catástrofe”.
“Como primer ministro, creo que hoy estamos en el borde de una catástrofe. Estamos a un paso del borde”, dijo a un congreso de emergencia con líderes regionales. El congreso declaró ayer que Yanukovich y no Yuschenko era el presidente electo. “No tomen medidas radicales”, dijo Yanukovich a los líderes regionales. “Repito, ninguna. Cuando se derrame la primera gota de sangre, no seremos capaces de detenerlo. Y quedará en las conciencias de la gente que provocó esta situación.” Yanukovich advirtió que la mitad de la economía de Ucrania se había detenido. “Regiones en el oeste no están pagando el combustible que están recibiendo”, dijo. “Los pagos al presupuesto se han detenido virtualmente y dentro de poco, todo caerá en el abismo”.
El congreso, en la ciudad del este, Severo Dontsk, votó unánimemente a favor de tener un referéndum en diciembre sobre el estatus de toda la zona sur y este del país, que favorece a Yanukovich sobre Yuschenko, el hombre que afirma que fue echado por fraude de la presidencia.
Eso aumenta el espectro de que Ucrania caiga en el mismo camino que recorrió Checoslovaquia y el este rusófilo, al separarse del oeste del país más proclive a mantener lazos estrechos con la UE y la OTAN en vez de mantenerlos con Moscú. Muchos de los delegados y de la gente que protesta fuera del centro del congreso hablaban de formar parte de Rusia o Crimea, una parte autónoma de Ucrania de habla rusa.
Yuschenko, que dio un discurso apasionado a más de cien mil de sus seguidores, que acampan hace siete días en la helada Plaza de la Independencia de Kiev, estaba furioso. Dijo que los políticos que pujaban por la independencia eran criminales y deberían ser procesados.
Pero Kuchma, el hombre que eligió a Yanukovich como sucesor, acusó a Yuschenko de no tener buena voluntad y de no cumplir su promesa de detener a los manifestantes que bloqueaban los edificios gubernamentales.
Llamando a tal acción “una grosera violación de la ley”, dijo, “Bien sabe que sería inaceptable en cualquier nación.” Por otro lado, ante las siniestras imágenes televisivas de las tropas de elite, Spetznaz, avanzando hacia Kiev, Yuschenko le dijo a sus seguidores que rompería las negociaciones si fuera usada la fuerza. “Dios nos ayude si las moribundas autoridades ucranianas toman el recurso de la fuerza en sus últimos días. Encontrarán una fuerza inimaginable.”
* De The Independent de Gran Bretaña. Especial para Página/12.
Traducción: Alicia B. Nieva.