El radicalismo decidió poner fin a la discusión desatada en el seno del partido sobre posibles alianzas con otras fuerzas y hacer foco en el plano interno para afianzarse como principal fuerza de oposición. “En el radicalismo hay un consenso unánime respecto de que éstos son tiempos para trabajar en el fortalecimiento del partido y en su vínculo con la sociedad”, afirmó el titular del Comité Nacional, Mario Barletta. El ex intendente de Santa Fe sostuvo además que la conformación de alianzas con otras fuerzas políticas “no forma parte de las preocupaciones ni de las conversaciones que se dan en el partido” en este momento.

La decisión de priorizar el frente interno, antes que explorar la posibilidad de acuerdos con otras fuerzas, fue tomada en forma orgánica en la primera reunión de la Mesa Directiva del partido desde la asunción de Barletta, que se llevó a cabo la semana pasada en la sede del Comité Nacional de Alsina al 1700. “Queremos que la Unión Cívica Radical vuelva a tener un vínculo con la sociedad, y lo queremos hacer cumpliendo el rol de una oposición responsable que tome todos los temas de la agenda de la sociedad que no son tratados como corresponde”, indicó Barletta. El titular de la UCR aseguró además que “durante el encuentro señalizaron los distintos proyectos de reforma de la carta orgánica y los diferentes aspectos del proceso de modernización del partido”. En ese marco, el Comité Nacional tiene en carpeta una serie de encuentros con el objetivo de mantener la cohesión interna del partido, luego de la crisis desatada tras el tercer puesto de las elecciones del 23 de octubre.