EL PAíS › HUBO HUEVAZOS E INSULTOS PARA CRISTINA KIRCHNER EN CATAMARCA
El día que Barrionuevo puso huevos
La senadora santacruceña y esposa del candidato oficialista fue atacada cuando hacía un acto con el vicegobernador catamarqueño. Kirchner responsabilizó a Luis Barrionuevo por el ataque.
La senadora Cristina Fernández de Kirchner pagó ayer en Catamarca el precio de haber sido una de las principales impulsoras de la expulsión de Luis Barrionuevo de la Cámara de Senadores: seguidores del dirigente gastronómico la recibieron a huevazos y la insultaron. “En el único lugar que recibí estas agresiones fue en Catamarca”, destacó la senadora, quien participó de un acto de apoyo a la candidatura presidencial de su marido, organizado por el vicegobernador Hernán Colombo. “No tengo ninguna duda: son las bandas de Barrionuevo”, denunció Néstor Kirchner y subrayó que “los argentinos tienen que tener en claro” que el sindicalista está apoyando a Carlos Menem.
“Fui agredida por un sector perfectamente identificado. Todos ustedes los catamarqueños saben bien de quién se trata”, comentó Fernández de Kirchner a propósito del modo en que la recibieron los seguidores de Barrionuevo y agregó que en Catamarca “no hay seguridad y de todo esto deberán tomar nota las autoridades nacionales y la sociedad toda”.
Si bien la senadora no mencionó con nombre y apellido al dirigente gastronómico, tampoco hacía falta: quienes la esperaron a la salida del aeropuerto local llevaban carteles que decían “Barrionuevo gobernador”. “Estaban organizados y esperándonos también en varios puntos de la ruta que conduce hacia la Casa de Gobierno provincial”, contaron miembros de la comitiva que acompañó a la esposa del candidato presidencial. También contaron que si bien la senadora no recibió ninguna agresión física, “los atacantes golpearon los vidrios y tiraron gran cantidad de huevos a la camioneta que la trasladaba hacia la Casa de Gobierno”.
En su ingreso a la sede del Ejecutivo catamarqueño –donde se entrevistó con el gobernador y candidato a la reelección por el Frente Cívico, Oscar Castillo–, Fernández de Kirchner también tuvo que soportar otra andanada de huevazos e insultos y lo mismo ocurrió durante el acto que encabezó junto a Colombo. “No nos han parado las balas de los militares y ahora no nos van a parar las patotas de los mafiosos”, dijo entonces desde el mismo escenario la senadora. Horas antes de su arribo a Catamarca, dos locales de partidarios de la candidatura presidencial de su esposo fueron, además, pintados con consignas en su contra.
“Esto no es un tema de la política, ni de peronistas y radicales, sino de dirigentes con prácticas violentas que nada tienen que ver con la democracia”, subrayó Fernández de Kirchner, quien recordó que días atrás estuvo en La Rioja y no tuvo ningún tipo de problema. En clara alusión a Barrionuevo, señaló también que “Carlos Menem no viene a Catamarca para no sacarse la foto con algunos aliados impresentables que tiene en esta provincia”.
Fernández de Kirchner había encabezado el año pasado en Catamarca un acto de apoyo a la candidatura presidencial de su marido, pero en aquella ocasión la organización había estado en manos de La Corriente, la línea interna del kirchnerismo dentro del PJ. El dato es que la postulación del santacruceño cuenta ahora en esa provincia con el aval explícito de Colombo, a diferencia de Castillo quien anunció su apoyo a la candidatura del radical Leopoldo Moreau. El vicegobernador proviene del peronismo y consiguió que en el acto de anoche hubieran más de tres mil personas.