La Sala III de la Cámara de Casación Penal confirmó que debe haber un único juicio oral por el asesinato de Mariano Ferreyra, donde estén en el banquillo tanto los policías acusados de liberar la zona como el líder de la Unión Ferroviaria (UF), José Pedraza; su número dos, Juan Carlos “Gallego” Fernández, y la patota que atacó al joven militante del Partido Obrero, además de haber disparado y herido a otros manifestantes. De esta manera respaldó una decisión del Tribunal Oral en lo Criminal Nº 21, que es el que llevará adelante el debate, que ya había rechazado planteos de Pedraza y de los policías. Las audiencias –aún sin fecha de inicio– se harían en los tribunales federales de Retiro.

La resolución fue firmada el viernes pasado por los camaristas Mariano Borinsky, Liliana Catucci y Raúl Madueño. Si bien no analiza los pormenores del expediente, concluye que es “improcedente” el planteo de desdoblar el caso en dos juicios. El fallo recurre a una cuestión técnica, que es que la Casación no suele resolver aquellas cuestiones donde no hay sentencia definitiva.

Para las querellas es sustancial incluir en el juicio a los policías, ya que consideran que tuvieron una participación esencial: como mínimo permitieron que actuara la patota de la UF que mató a Mariano e hirió a balazos a Elsa Rodríguez, Ariel Pintos y Nelson Aguirre.

Otra resolución de Casación rechazó por “inadmisible” la recusación contra uno de los jueces del TOC21, Horacio Dias. La había presentado uno de los policías acusados, Hugo Lompizano, que estaba en el área de Operaciones de la Federal y luego incluso fue jefe de las comisarías.

Mariano Ferreyra fue asesinado el 20 de octubre de 2010, cuando participaba de una protesta de trabajadores tercerizados del ferrocarril Roca. Pedían reincorporaciones de despedidos y se cuestionaba el régimen de precarización laboral propio de la tercerización.

En el juicio oral serán juzgados ocho hombres identificados como parte de una patota que respondía a la conducción de la UF, que fueron a atacar a los manifestantes no sólo con palos y piedras, sino con armas de fuego. De ese grupo, los tiradores habrían sido Gabriel Sánchez y Christian Favale, según determinó la Justicia. Pedraza y su número dos llegarán al juicio acusados como instigadores del homicidio. Los policías están procesados por abandono de persona, pero podría agravarse su situación en el debate oral.