En la misma línea que Sergio y Pablo Schoklender, la ex secretaria administrativa de la Fundación Madres de Plaza de Mayo se defendió ante el juez Norberto Oyarbide atacando a la titular de la entidad, Hebe de Bonafini. Según dijo Alonso al prestar declaración indagatoria, Bonafini conocía “la totalidad de las operaciones, cobros, pagos y otras gestiones que se realizaron”. Dijo que ella fue secretaria técnica y contable de la fundación desde 2001 y deslizó la teoría de que hubo dinero vinculado con las obras de las viviendas sociales que se podría haber utilizado para otros gastos de la fundación.