El Gobierno de la Ciudad se avino a cumplir con la orden de la Justicia y usará los fondos que la Nación le envió para el subte. La decisiòn aleja, de hecho, la reanudaciòn de la huelga del servicio de subterràneos que alterò durante diez dìas el trànsito porteño. Así lo confirmó ayer la vicejefa del gobierno porteño, María Eugenia Vidal, luego de la reunión que mantuvo con el ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, y el jefe de Gabinete bonaerense, Alberto Pérez, para analizar la situación del transporte metropolitano. La administración macrista no apelará el fallo dictado por la jueza Patricia López Vergara, aunque de todas maneras aclaró que esto no significa que asuma ninguna otra responsabilidad sobre los subtes.

“El traspaso en estas condiciones no lo vamos a aceptar, ya que faltan inversiones a cargo del gobierno nacional”, señaló Vidal en este sentido.

La audiencia del Ente Metropolitano de Transporte había generado expectativas por la posibilidad de que hubiera algún avance en la discusión sobre la titularidad de la red. Pero Randazzo y Vidal no hablaron mucho del subte, sólo los minutos iniciales del encuentro. Luego, en sus declaraciones a los medios volvieron a cruzarse.

Esto porque la vicejefa porteña aseguró que en la audiencia el gobierno nacional le había “comunicado” que liberaría el dinero de los subsidios, ante lo que el ministro sostuvo que los fondos siempre estuvieron a disposición de la Ciudad.

“Nuestra principal preocupación era un nuevo conflicto si la empresa no pagaba los sueldos, pero el gobierno nacional nos ha comunicado en esta reunión que va a liberar los fondos que tiene depositados en el Banco Nación. Se comprometió a hacerlo y, si cumple, parte de ese dinero servirá para cubrir lo que la empresa y los delegados acordaron en las paritarias”, fue lo que Vidal dijo a los movileros al salir de la Casa Rosada.

Randazzo le salió al cruce de la declaración en una conferencia de prensa, en la que replicó que los fondos que la Nación aporta para los subtes “estuvieron siempre a disposición” del Gobierno de la Ciudad para que los usara.

“Hay un fallo judicial de la jueza en lo Contencioso, Administrativo y Tributario Nº 6 de la Ciudad, Patricia López Vergara, que le dice al jefe de Gobierno de la Ciudad que utilice los fondos que tenía disponibles desde enero y se cumpla así con el acta acuerdo firmada el 3 de ese mes y es más, le dice en qué los tienen que usar”, señaló el ministro.

“Para nosotros el traspaso del subte es un tema absolutamente cerrado”, remarcó luego. “Lo importante acá es que este fallo ratifica lo que nosotros veníamos señalando en relación a los recursos que la Ciudad tenía disponible, que son actualmente 124 millones de pesos, y ordenó a la Ciudad a destinar esos fondos para gastos operativos y mantenimiento del servicio”, concluyó Randazzo.

El resto de la reunión fue dedicada a cuestiones del Ente Metropolitano de Transporte, que fue creado hace dos meses por el gobierno nacional con el objetivo de mejorar el transporte público y la interconexión entre el conurbano y la Capital Federal.

El organismo es tripartito –Nación, Ciudad y provincia–. En representación del gobierno bonaerense estuvo el jefe de Gabinete de Daniel Scioli, Alberto Pérez.

Las partes acordaron designar cada cual un representante, y para esto la Ciudad pidió quince días para hacer sugerencias y definir al funcionario que ocupará ese puesto.

El traspaso de los subtes y las 33 líneas de colectivos que circulan en la Ciudad será el tema más complicado de resolver en el Ente, pero también hay en agenda otras cuestiones, como el soterramiento del ferrocarril Sarmiento, un política articulada de tarifas y alternativas para descomprimir las autopistas.

En cuanto a los subtes, el punto en el que los funcionarios coincidieron es en que el fallo judicial que ordenó a la Ciudad usar los fondos enviados por la Nación fue una buena medida para evitar que haya un nuevo paro. Vidal, Randazzo y también el ministro de Trabajo, Carlos Tomada, consideraron que la amenaza de que Metrovías no cumpla con el acuerdo paritario firmado con los metrodelegados y la UTA está desactivada.

Al menos para el pago de los sueldos de agosto. La concesionaria del Grupo Roggio ha planteado que el origen de su alegado déficit no es sólo que no le llegaban los 30 millones mensuales de subsidios enviados por la Nación, sino que tampoco cuenta con los 30 millones que se comprometió a poner la Ciudad. La administración macrista, que dice no tener presupuesto para cubrirlos, aumentó el boleto de los subtes para que sus 30 millones le entraran a la concesionaria como recaudación propia, pero la medida terminó siendo perjudicial porque mucha gente se pasó a los colectivos. Según la empresa, por este motivo hoy recaudan menos que antes de la suba de la tarifa.