El ex presidente Fernando de la Rúa expondrá desde esta mañana su versión acerca del soborno que supuestamente su gobierno pagó en abril de 2000 a un grupo de senadores peronistas para la aprobación de la ley de reforma laboral, que su gobierno consideraba “fundamental” para la gobernabilidad, según el testimonio del arrepentido Mario Pontaquarto. De la Rúa es uno de los acusados, junto a ex funcionarios de su gestión y a los legisladores que habrían cobrado la coima.

Desde la querellante Oficina Anticorrupción destacaron que la declaración de De la Rúa, así como la del ex titular de la Secretaría de Inteligencia del Estado y también imputado Fernando de Santibañes, es importante por el rol que jugó en el entramado de la negociación ilegal y por su condición de jefe de Estado. Sin embargo, la expectativa por lo que vaya a decir acaba en una predecible negación de los hechos.

De la Rúa es el segundo de los imputados que declarará ante el Tribunal Oral Federal Número 3, a cargo de los magistrados Gerardo Larrambebere, Guillermo Gordo y Miguel Pons, en la etapa oral del proceso que lleva casi doce años y que sufrió varias trabas en su camino hacia el juicio. La semana pasada declaró el ex secretario parlamentario Mario Pontaquarto, quien en 2003 confesó haber sido el “mandadero” de la entrega a los senadores acusados de casi cinco millones de dólares salidos de la caja chica de la SIDE, a cambio de su voluntad en el recinto.

Su procesamiento por cohecho activo llegó en 2007, dos años después de la acusación del resto de los imputados, en un avance de la investigación llevada a cabo por el fiscal Federico Delgado y el juez de Instrucción Daniel Rafecas.

Luego seguirán las declaraciones de De Santibañes, el ex ministro de Trabajo de la Alianza Alberto Flamarique y los ex senadores Augusto Alasino, Alberto Tell, Remo Costanzo y Ricardo Branda.

Probablemente, la audiencia de hoy comience con la lectura de contradicciones entre lo dicho la semana pasada y lo declarado en la etapa de instrucción que las defensas de los imputados encontraron en el testimonio de Pontaquarto. No obstante, desde la Oficina Anticorrupción realizaron un balance positivo de la exposición del “arrepentido”.