El gobierno bonaerense recibirá este mediodía, en la sede de la cartera educativa provincial, a los representantes del Frente Gremial Docente, buscando evitar las 72 horas de paro anunciadas por los maestros para el 8, el 9 y el 10 de abril próximos. Sin embargo, desde el Ejecutivo aclararon que sólo se discutirán asuntos “de la agenda educativa” y reiteraron que la negociación salarial concluyó. “El tema salarial saben que ya fue, y ante el inminente tiempo de liquidación de salarios fue instrumentada la proyección del 22,6 por ciento”, dijo el gobernador Daniel Scioli. Mientras tanto, los sindicatos docentes marcharon en el microcentro porteño reclamando un incremento del 30 por ciento. El líder de Suteba, Roberto Baradel, advirtió que “si no se acepta discutir salarios, esto no se va a resolver”. La titular de la FEB, Mirta Petrocini, afirmó que van a “asistir a la reunión y escuchar los planteos”, pero que eso “no determina que se levanten” las medidas de fuerza.

El Frente Gremial anunció tres días de paro para la segunda semana de abril, y movilizaciones con actividades distritales hasta entonces. En busca de una tregua en el conflicto, Scioli le instruyó a la directora de Cultura y Educación, Nora de Lucía, que convoque a los gremios para un encuentro durante el día. Los sindicatos pospusieron la reunión para hoy, argumentando tener “la agenda completa”. Ayer realizaron una marcha con antorchas desde el Congreso de la Nación hasta la Casa de la Provincia (Callao 237), en Capital.

Las autoridades provinciales y los gremios se verán las caras a las 12 en la Dirección de Escuelas, ubicada en la calle 13, entre 56 y 57, de La Plata. Según fuentes de la gobernación, “no se abordará el tema salarial”. En este sentido, Daniel Scioli expresó que “el tema salarial ya fue” y la convocatoria tiene como fin tratar “otros temas que ellos mismos han planteado” y que “estamos abiertos a conversarlos”, como la infraestructura de las escuelas, los servicios de transporte y comedores, y la falta de aportes a la obra social IOMA.

Además, Scioli manifestó su descontento con el paro, al que consideró “salvaje”, y estimó que las medidas de fuerza “ya superan el 50 por ciento de los días que se tenían que haber cursado normalmente”. Afirmó que los paros generan “trastorno social para familias que tienen planificada una vida cotidiana con los chicos en la escuela”, y que tiene constancia del “hartazgo de los padres”. Aun así, descartó por ahora el llamado a conciliación obligatoria porque, según se definió a sí mismo, es “un buscador permanente de soluciones y no de problemas”. “A mí no me van a correr con que no dialogamos”, concluyó, fiel a su estilo.

Fuentes de los distintos sindicatos nucleados en el Frente –Suteba, FEB, AMET, UDA y Sadop– afirmaron a Página/12 que el conflicto sólo finalizará si cambian los términos del aumento otorgado por la provincia. Aunque pretenden un porcentaje cercano al 30 por ciento, la principal objeción responde a la segmentación del incremento: sobre el básico de 2900 pesos se percibe un 12,5 por ciento mensual desde marzo, se alcanza el 19,5 por ciento en septiembre y se llega al 22,6 por ciento en diciembre.

“La propuesta es inferior al piso que establecía la paritaria nacional, donde el primer tramo del aumento era de 440 pesos, mientras que lo que ofrece la provincia para el primer tramo es 340 pesos”, se quejó el secretario general de Suteba, Roberto Baradel. “No nos pueden pedir que aceptemos ese ofrecimiento”, sostuvo, y aseveró que “estamos en el aula, como la semana que pasó, como ésta y como la que se viene, por lo que reclamamos que convoque a los docentes para buscar una solución a este conflicto”. No obstante alertó que “si no aceptan discutir salarios, esto no se va a resolver”.

“Vamos a asistir a la reunión y escuchar los planteos que hagan desde la provincia pero, en principio, esta convocatoria no determina que se levanten las medidas acordadas con el Frente Gremial”, declaró la titular de la FEB, Petrocini. Opinó que “las vías de negociación deben conducir a satisfacer las legítimas demandas de los educadores” y reivindicó la protesta docente porque “si los docentes no hubiésemos sostenido la lucha, el gobierno hubiera firmado un decreto para aumentarnos un 7 por ciento, como eran sus pretensiones iniciales”.

Informe: Juan Manuel Frías.