La línea C del subte estuvo paralizada ayer en lo que fue una jornada de protestas de los metrodelegados, que denunciaron a empleados de seguridad de Metrovías por haber golpeado a un trabajador. La apertura de molinetes por una suspensión de trabajadores del subte derivó luego, tras incidentes, en un paro total de la línea que une Retiro y Constitución.

El secretario general del sindicato, Roberto Pianelli, denunció que a un delegado auxiliar de la línea “le partieron la cara de dos trompadas” y aseguró que hay “un video que lo prueba”. En tanto, desde Metrovías negaron que la agresión haya ocurrido y sostuvieron que fue el metrodelegado quien “atacó a empleados de seguridad”. Para la empresa, la medida fue “intempestiva” e “infundada”. También los trabajadores de la línea D realizaron medidas de fuerza por la negativa de Metrovías a tomar a tres conductores propuestos por el gremio y cumplieron su tarea a reglamento, con lo que hubo demoras en el servicio.