La Sala I de la Cámara Federal no envió ayer a la Cámara Federal de Casación Penal la causa por la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman, por lo que recaerá finalmente en manos del fiscal Javier De Luca. Según explicaron en Tribunales, los camaristas no completaron aún los trámites administrativos para dar curso a la apelación planteada por el fiscal general Germán Moldes, quien pretendía que el caso quedara a cargo del fiscal Ricardo Weschler. De Luca, quien desde hoy estará de turno en Casación, fue cuestionado por Moldes por su pertenencia a la agrupación Justicia Legítima y será quien deba decidir si mantiene la apelación de la causa o la rechaza.

A sabiendas de que era posible que finalmente interviniera De Luca, Moldes había salido a advertir que un fiscal de Justicia Legítima podía llegar a intervenir en el caso y dado a entender que, por lo tanto, dictaminaría en contra de la denuncia de Nisman. Por eso afirmó que se iba a apresurar a hacer su presentación para evitarlo, en una admisión implícita de la práctica del denominado forum shopping, una maniobra para evitar los sorteos y elegir funcionarios afines para que intervengan según los propios intereses. Según dijo, apelaría “rápidamente” porque no quería caer “en esta maniobra de ingeniería judicial y que me esté esperando un fiscal militante de Justicia Legítima”, en relación a De Luca.

El fiscal Moldes presentó ayer a primera hora un escrito ante la Cámara Federal en el que le pidió al tribunal que ponga fin a “toda dilación y demora injustificada” y eleve “hoy mismo (por ayer)” a la Cámara de Casación Penal su apelación. El funcionario del Ministerio Público fundamentó su petición en que se encuentran “agotados todos los pasos procesales”, y por consiguiente “sin más trámite” se debe elevar la causa a Casación y allí, prosiguió, dar “inmediato tratamiento a ese recurso”.

La Cámara aceptó el martes la apelación de Moldes. Para que la causa pase al otro tribunal se debe cumplir una serie de pasos administrativos que comenzaron a darse ayer, como la notificación a todas las partes, pero faltaron otros.

“Hasta aquí llegó mi responsabilidad personal y funcional en este trámite de apelación. Todo lo que tenía por decir, lo dije, y todo lo que tenía por hacer, lo hice”, afirmó Moldes. Y reivindicó que “entregó la denuncia de Alberto Nisman con vida, a pesar de los redoblados y combinados esfuerzos desarrollados por ponerle prematuro final”.

Finalmente, la Cámara enviará hoy a Casación la causa para que se sortee la sala de ese tribunal que intervendrá en el caso. Previamente, el fiscal De Luca deberá dictaminar si confirma la apelación de Moldes o la desestima. En este último caso Casación no debería intervenir.

Por su parte, De Luca dijo estar “ofendido” por los dichos de Moldes y calificó como “una locura, una barbaridad” la apelación rápida para determinar qué fiscal iba a intervenir, lo que entendió como un forma de hacer forum shopping de fiscales. “Los fiscales que pertenecemos a ese espacio político judicial no resolvemos los expedientes políticamente sino jurídicamente, y ésa es justamente una de las banderas de Justicia Legítima: el no resolver más las cosas por conveniencias políticas, por política comiteril”, sostuvo De Luca.

Nisman denunció a la presidenta Cristina Fernández, al canciller Héctor Timerman, al diputado Andrés “Cuervo” Larroque y al dirigente Luis D’Elía, entre otros, por el presunto encubrimiento de los iraníes acusados del atentado a la AMIA mediante el dictado del Memorándum de Entendimiento con Irán. Tras la muerte de Nisman el pasado 18 de enero, la posta de su denuncia la tomó el fiscal Gerardo Pollicita, quien pidió abrir una investigación del caso. El juez Daniel Rafecas, sin embargo, no hizo lugar a su pedido y desestimó la denuncia al entender que no había delito.

La Sala I de la Cámara Federal confirmó la desestimación de la denuncia y Moldes apeló la resolución para que en el caso intervenga Casación. El tribunal aceptó la apelación al entender que su fallo se puede equiparar a una sentencia definitiva, porque cierra el avance de una investigación.