EL PAíS › DEUDA, EQUIDAD Y CRECIMIENTO EN EL DOCUMENTO FINAL
El ALCA se quedó sin fecha
La declaración final de la Cumbre de las Américas, firmada ayer por los presidentes de los 34 países que participaron del encuentro, contempla la posición argentina en su disputa con los acreedores. “El crecimiento económico sostenible es el factor más importante para la administración y el pago del servicio de la deuda pública”, señala el documento, que también destaca la necesidad de reducir la pobreza en la región y fortalecer la gobernabilidad y la democracia y establece iniciativas para la cooperación en la lucha contra la corrupción, el combate del terrorismo y el fomento del comercio. La declaración hace mención al ALCA, uno de los temas que más controversias generó en la cumbre, aunque no fija una fecha precisa para su entrada en vigencia.
La cuestión de la deuda fue considerada por los presidentes que concurrieron a Monterrey como uno de los puntos determinantes para alcanzar la meta de reducir la pobreza que aqueja a 225 millones de latinoamericanos. La Declaración de Nuevo León –tal el nombre del documento final del encuentro– dedicó largos párrafos sobre los pasos que deberían adoptarse para lograr ese objetivo.
Si bien la declaración sostiene que “cada país es el principal responsable de su propio desarrollo social y económico a través de políticas racionales”, resalta también la responsabilidad de la comunidad financiera internacional y la necesidad de resolver el problema de pago de las abultadas deudas públicas de los países latinoamericanos. Así, hace un llamamiento a “todos los acreedores a participar en acuerdos de alivio de la deuda” de los países más pobres y endeudados. La mención de que el crecimiento es una condición indispensable para saldar la deuda constituye un reconocimiento a la postura que el gobierno argentino presentó en Dubai para la reestructuración de sus títulos en default.
El ALCA y su fecha de puesta en marcha fue el tema más difícil de consensuar. Las delegaciones diplomáticas de los distintos países participantes en el encuentro estuvieron negociando hasta último momento y finalmente acordaron incorporar una mención que ratifica los plazos convenidos en la primera Cumbre de las Américas, celebrada en Miami en 1995.
La mención es una fórmula intermedia entre la propuesta de Estados Unidos de fijar el 1º de enero de 2005 para la entrada en vigencia del acuerdo de libre comercio en el continente y la de otros países, entre ellos Brasil y Argentina, que objetaron incluir mayores precisiones al respecto. Aun así, Venezuela sólo accedió a firmar la declaración “con reservas” por considerar que “el plazo establecido del 2005 es muy breve”.
“Está a la vuelta de la esquina”, dijo el presidente venezolano, Hugo Chávez, ante los demás mandatarios a la hora de la firma del documento.
La declaración final de la cumbre también incluye un compromiso de todos los gobernantes para fortalecer su lucha contra el terrorismo, así como del desarrollo de las pequeñas y medianas empresas, a las que califica como “componente fundamental para el crecimiento económico”. Con ese objetivo, plantea el objetivo de triplicar de ahora al 2007 los préstamos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) destinados a las pymes.