El dirigente gastronómico Dante Camaño, cuñado de Luis Barrionuevo, se despachó ayer con una pintoresca definición, especialmente tratándose de un dirigente sindical. “Acá hubo una orgía de derechos, pero sin obligaciones”, sostuvo acerca de los gobiernos kirchneristas. Agregó que nadie decía nada porque “era antipático” pero que el populismo “llevó a la Argentina al borde de ser Venezuela”. En la misma línea, también criticó el ingreso irrestricto de extranjeros al país porque utilizan servicios públicos gratuitos y generan “un dispendio de recursos que tiene que pagar el Estado”.