El gobernador de Chaco, Domingo Peppo, hará hoy de anfitrión de la reunión del grupo de gobernadores e intendentes bonaerenses que buscan impulsar una remake de la renovación peronista para diferenciarse del kirchnerismo. Con ese objetivo se reunirán en la Casa de Chaco y, adelantaron, el 6 de septiembre harán un acto que recordará el lanzamiento en 1985 de aquella renovación que encabezaba Antonio Cafiero contra Herminio Iglesias. “Buscamos generar mesas de diálogo, evitar la confrontación por la confrontación misma, si no plantear una construcción. Nos parece un escenario parecido al de aquella época y creímos una buena idea reivindicar a la renovación”, explica Peppo.

–Está convocada básicamente por los gobernadores y se ha sumado un grupo de intendentes de la provincia de Buenos Aires con los que hemos tenido algunas reuniones previas, también algunos senadores y diputados. Buscamos avanzar un poco más en lo que llamamos el proceso de renovación y fortalecimiento del justicialismo. Queremos generar una oposición fuerte, constructiva, que pueda llevar adelante una agenda de oposición pero también de trabajo desde el rol institucional y partidario que tenemos. Así evitamos que el Gobierno se ponga enfrente de una oposición débil, que es lo que pretenden hacer con el kirchnerismo.

–Todos los gobernadores del PJ. Sabemos que hay algunos que tienen alguna cuestión especial. Por ejemplo, Juan Manuel Urtubey tiene el aniversario de la segunda ciudad de Salta y avisó que no va a poder asistir. Está también el caso de Gildo Insfrán, que está de luto por el fallecimiento de su madre. Fuera de eso, están todos invitados. Esencialmente planteamos una fuerte posición de diferenciarnos de la conducción del kirchnerismo porque ahí está la debilidad que aprovecha el Gobierno. Hoy estamos viviendo un proceso de fuga de militantes.

–Entendemos que ella está en otro proceso constructivo que en algún momento buscó distanciarse del justicialismo como partido. Recuerdo una reunión que tuvimos cuando ya habíamos sido electos y ella todavía era presidenta, que nos dijo que del Partido Justicialista no iba a participar sino que lo iba a hacer desde otro lugar. Nosotros debemos caminar en la construcción de un gran espacio político hacia adelante, que nos permita generar vínculos y, porqué no, acuerdos con vistas a 2017 y 2019 con quienes se han ido del peronismo y tienen raíces en nuestro partido.

–Por ejemplo, Massa. No es que estamos diciendo que se afilie al peronismo, pero tenemos que tener un diálogo para la construcción de la visión de un país desde una mirada peronista.

–El peronismo tiene una representación institucional que en su momento sirvió para evitar la intervención, pero nos parece que tenemos que dar una vuelta de rosca a esta conducción en el sentido de plantear situaciones un poquito más progresistas en algunos casos y también que tenga que ver con el nivel de representación institucional que dan los gobernadores y los intendentes.

–Decimos que debe ser opositor pero al mismo tiempo debe tener capacidad de diálogo. Hacer aportes y también marcar fuertemente las diferencias. El Gobierno toma hoy como oposición al sector más débil y comprometido con algunas cuestiones del corrupción del gobierno anterior y quiere generar un nuevo “relato” a partir de ahí. Nosotros queremos generar una agenda para adelante y ponernos del lado de la gente en la defensa del empleo, en pelear una distribución de recursos de manera federal, en reactivar la obra pública, en la reforma política. Los que tenemos responsabilidades como gobernador tenemos un rol institucional y no nos podemos hacer los distraídos y tenemos que fortalecer al partido desde ahí. Quiero aclarar que no somos para nada sectarios, sino que lo que planteamos es un cambio de estilo y de metodología.