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Desde el mismo momento en que la relación entre Néstor Kirchner y Eduardo Duhalde se tensó, los hombres del PJ bonaerense comenzaron a buscar la manera de frenar el avance kirchnerista en la provincia de Buenos Aires. Una alternativa era candidatear al hoy presidente de la comisión de representantes del Mercosur para un cargo electoral o partidario. Y así lo hicieron con su postulación a presidir el PJ bonaerense. Sin embargo, desde Venezuela Duhalde se encargó de desbaratar, al menos por ahora, estas versiones: “A mí no me cuenten para nada”, dijo desde Caracas en lo que podría convertirse en el primer acto de un operativo clamor.
Los rumores sobre una posible candidatura a presidir el PJ de su provincia, actualmente en manos del longevo intendente de Lanús, Manuel Quindimil, se comenzaron a escuchar hace más de quince días. En ese lapso Duhalde no dijo nada y su nombre desplazó a la vicepresidencia a José María Díaz Bancalari, el bonaerense que mejor relación tiene con el Ejecutivo nacional. Ni lerdo ni perezoso, el presidente de bloque de diputados sostuvo que Duhalde es el único dirigente que puede mantener unido al partido.
Ahora todo parece volver a fojas cero con las declaraciones de Duhalde desde Caracas, donde participó como veedor en el referéndum revocatorio que superó holgadamente el presidente Hugo Chávez. “A mí no me cuenten para nada. Yo me he comprometido y estoy muy contento de ayudar a mi país en la región”, dijo en referencia a la jefatura del Mercosur que ocupa por iniciativa de Kirchner. La frase llegó después de que varios referentes bonaerenses sostuvieran la necesidad de que conduzca el PJ de su provincia y se comenzara a desatar lo que en la jerga política se conoce como “operativo clamor”.
Para evitar más detalles, Duhalde zafó del tema al considerar que más importante sería que Kirchner asuma la presidencia del consejo nacional justicialista. Es “lógico”, dijo, al tiempo que descartó que el ex presidente Carlos Menem pueda tener alguna incidencia en el tema. En ese sentido, el caudillo bonaerense calificó como una “fantasía” la posibilidad de que existan contactos entre el Gobierno y Menem destinados a que Kirchner tenga el consenso necesario para asumir en el PJ.
“Yo no creo que Menem tenga ninguna incidencia el tema del justicialismo”, sostuvo Duhalde. La posibilidad de que hubiera existido un contacto en ese sentido surgió hace dos semanas cuando el jefe de Gabinete, Alberto Fernández viajó a La Rioja donde mantuvo una reunión con el gobernador Angel Maza. En esa oportunidad se rumoreó la existencia de un encuentro entre el ministro y el senador Eduardo Menem para avanzar en cuestiones partidarias. Fernández lo desmintió categóricamente.
En este sentido, Duhalde aportó un argumento más al reclamo de que Kirchner se haga cargo del partido. Recordó que “es una constante del justicialismo que el presidente de la República presida el peronismo sin necesidad de que tenga una actividad partidaria muy importante”.
Lo curioso, en todo caso, fue la recomendación final que hizo Duhalde al sostener que “si él (por Kirchner) considera que no debe serlo se puede constituir un comando del justicialismo con los gobernadores y los dirigentes más importantes para ayudarlo”, señaló tal vez sin recordar cómo finalizó el tumultuoso congreso partidario del 26 de marzo pasado cuando se eligieron autoridades partidarias con estas representaciones.