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Dispuesta a revalorizar en la campaña la figura de la “Abanderada de los Humildes”, Cristina Fernández de Kirchner aseguró que Eva Perón fue la figura histórica que mejor simbolizó el cambio en la Argentina conservadora de mediados del siglo pasado que había excluido a los pobres y negado el voto a las mujeres. “Lo que Eva hizo fue mucho más que la participación de la mujer en política. Ella cambió el sistema que operaba en la Argentina en los ’40 de una manera que dio poder a los trabajadores y a las mujeres”, sostuvo la primera dama en una entrevista publicada por la revista estadounidense Newsweek en su edición en inglés, en la que también explicó su postura contraria a la despenalización del aborto.
Cristina Kirchner concedió el reportaje durante su viaje a Los Angeles para inaugurar una muestra de Evita, de ahí el cariz del diálogo.
Y de Evita, la entrevista pasó al feminismo y al papel de las mujeres en la política. En ese sentido, aseguró que pese a haber recorrido “un largo camino” todavía no se logró que las mujeres alcancen “un grado significativo de participación en la toma de decisiones ejecutivas”.
“La mayoría de los que toman decisiones siguen siendo hombres y aún tenemos que dar ese paso. Estamos en camino de lograrlo”, remarcó. Cristina Kirchner negó ser “feminista”, pero aclaró que se consideraba “femenina” y explicó la diferencia. “Creo que si se reconoce al feminismo como una categoría política se está validando la noción de que el machismo también lo es. Creo en defender los derechos de la mujer y de las minorías, pero no bajo la etiqueta de ser feminista”, afirmó.
En otro tramo, la senadora y candidata a su reelección por el Frente para la Victoria explicó que no está de acuerdo con la despenalización del aborto “porque soy católica, pero también debido a profundas convicciones”. Y siguió: “Es verdad que el aborto es una cuestión que debe ser instalada en la sociedad, pero no está aún en la agenda política de la Argentina como tema de debate”.
En otra respuesta, al ser consultada acerca de si en 1997 fue expulsada del bloque peronista por ser mujer, Cristina Kirchner se mostró convencida de que si hubiera sido hombre su suerte también habría sido diferente, aunque recordó que, en verdad, su enfrentamiento con el resto de la bancada de senadores peronistas fue porque no apoyaba una ley que impulsaba por entonces el gobierno de Carlos Menem.