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Aunque a primera vista no parezca, el establishment argentino, la mayor parte de lo más granado de los empresarios y el poder, preferiría que Carlos Menem no gane y que no vuelva a ocupar la Presidencia. Varios consultores y encuestadores de primer nivel estudiaron qué quiere el establishment mediante las llamadas encuestas de líderes de opinión. El diagnóstico unánime es el siguiente: Menem va a provocar una violenta polarización en la sociedad, un enfrentamiento muy duro que pondría en peligro la estabilidad y la gobernabilidad. Por ello, lo mejor es que no vuelva a la Casa Rosada. Igualmente, la clave de la gobernabilidad -siempre según los empresarios– está en el peronismo, no en otros partidos. El candidato ideal que veía el establishment era Carlos Reutemann, pero según los consultores es muy posible que ahora miren hacia José Manuel de la Sota. Eso sí, si Menem gana, para los empresarios no sería lo mejor, pero tampoco lo peor.
Las encuestas de líderes de opinión son estudios muy difíciles porque significa conseguir entrevistas con presidentes de bancos, cadenas comerciales, empresas agropecuarias, fábricas, privatizadas y también consultores que trabajan para ellos. Justamente, el objetivo es pulsar las opiniones de lo que se conoce como el establishment. Varios de los encuestadores que hicieron estudios de ese tipo dialogaron con Página/12, pero no quieren aparecer públicamente porque los datos son confidenciales y tienen un acuerdo de confidencialidad con quienes los contrataron. Sin embargo, hubo dos consultores que sí aceptaron dar a conocer los resultados de sus estudios y coinciden totalmente con lo que esbozaron -en estricto off the record– sus colegas. He aquí el diagnóstico:
u Graciela Römer, Römer y Asociados: “El establishment es prágmático. No verían con desagrado que Menem volviera al gobierno, pero eso no significa que lo vean con agrado. Nosotros hicimos una investigación muy a fondo sobre este tema con entrevistas en el sector denominado de líderes de opinión, donde efectivamente están los empresarios. La mayor sintonía ideológica es con Ricardo López Murphy, pero aquí debo repetir que son pragmáticos: el lema sería no hay gobernabilidad fuera del peronismo. Y en ese terreno les gustaba mucho Carlos Reutemann y creo que ahora se inclinarán hacia José Manuel de la Sota. ¿Por qué? Porque en la sociedad hay un fuerte reclamo de recambio y en ese reclamo hay una demanda de ética importante. En ese terreno, Menem recoge un fuerte rechazo. Entonces, si el factor clave es la gobernabilidad, el ex presidente no encaja bien, básicamente porque significa polarización, inestabilidad política. Lo que le importa al establishment, lo central para los empresarios, es la gobernabilidad, y Menem significa más conflicto”.
u Enrique Zuleta Puceiro, titular de IBOPE OPSM: “En principio diría que el llamado establishment no apoya a Carlos Menem por ser el pasado y representar la confrontación social. Es un mundo de choques que el empresariado ve inmanejable. Piensan en las FARC de Colombia, en Oviedo en Paraguay, en Lula en Brasil: o sea conflicto. Es posible que igual jueguen unas fichas a Menem, pero el grueso irá a otros candidatos, principalmente me parece que el respaldo va ir inicialmente a De la Sota. Sintoniza bastante con ellos en el discurso. Eso sí, me parece que los empresarios no quieren ninguna aventura, de manera que estarán contra lo que va apareciendo por fuera del PJ. Debo aclarar que la palabra establishment es hoy relativa. No existen la UIA, la Sociedad Rural o el Consejo Empresario como grandes unidades. En primer lugar porque está todo muy fragmentado: una cosa son las privatizadas, otra los bancos y otra muy distinta todas las empresas que están en la insolvencia. Basta ver que de las 50 empresas más grandes, todas son extranjeras”.