EL PAíS
“En Brasil influyeron más las ideas de Freire que las de Marx”
Frei Betto hizo esta afirmación en el Foro y dijo que al movimiento social de su país no lo afectó la caída del Muro “porque siempre estuvo ligado a los pobres”. Noam Chomsky advirtió sobre el sistema de dominación mediática.
Por E. T.
Desde Porto Alegre
Lentamente, como si no quisieran llegar al fin del evento, los participantes del Foro Social Mundial tuvieron ayer un día repleto de actividades. Además de la concentración contra el ALCA (ver aparte), en simultáneo se sucedieron masivas presentaciones del intelectual norteamericano Noam Chomsky, que criticó el sistema de dominación mediática en su país; el brasileño Frei Betto, en la actualidad asesor del presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva en la política de Hambre Cero; la cubana Aleida Guevara, hija de Ernesto “Che” Guevara; el actor norteamericano Dany Glover y la ministra de Medio Ambiente de Brasil, Marina Silva. También continuaron los debates puntuales que vienen desarrollando los distintos movimientos sociales en busca de puntos comunes para lograr una globalización diferente a la neoliberal. Algunos apuntes de la crónica de un día agitado.
u “La historia de los imperios también indica que muchos de ellos han caído por la influencia externa”, comenzó a responder Chomsky al periodista que pretendía saber si para poner fin al neoliberalismo no se debía tratar de convencer a la opinión pública norteamericana. “En 1976, con motivo del bicentenario de la independencia de los Estados Unidos se hicieron muchas encuestas preguntándole al público qué frases, del menú que se les presentaba, estaban en la Constitución nacional”, prosiguió Chomsky. “El resultado dejaba en claro el desconocimiento que el pueblo estadounidense tiene de su Constitución. Pero más llamativo resultó que hubo una definición que por su alto contenido humanístico todos los consultados afirmaron que integraba la Constitución. Era la que señala: “de cada quien según su capacidad y a cada cual según su necesidad”. La definición que los norteamericanos consideraban propia era la forma que según Karl Marx debía estructurarse una sociedad en su etapa de organización comunista.
u Para el lingüista norteamericano no tiene sentido demonizar a la opinión pública de los Estados Unidos. “En todo caso habrá que identificar a las élites dominantes e impedir que continúen con las políticas que vienen desarrollando”. Luego de esto afirmó que en su país el sistema de dominación mediático está muy desarrollado. Aun así aseguró que la mayoría de la opinión pública está en contra de la guerra y del Nafta. Esto explica, según Chomsky, por qué los contenidos de los acuerdos del ALCA no pueden ser discutidos públicamente.
u El sacerdote Frei Betto se resiste a denominar al actual proceso mundial como “globalización”. Se inclina más por el término “globocolonización”. La definición es clara, para Betto se intenta “imponer al planeta un modelo de sociedad”. Al hablar sobre el programa Hambre Cero, el asesor de Lula afirmó que “no se trata de un plan asistencial sino de inclusión social”. De esta manera, el éxito del programa social se podría medir en la medida en que los beneficiarios puedan dejar de contar con esa ayuda para comenzar rápidamente a ser ciudadanos que se ganan sus propios recursos económicos. Contó que vivió 5 años en una favela de Spíritu Santo y que sólo recibió la propuesta de contar con el título de propiedad donde moraba cuando el gobierno descubrió que él era un evangelizador. Su respuesta no hay que adivinarla, aunque Betto se encargó de recordarla: “O hay títulos de propiedad para toda la favela o para ninguno”. Esto le permitió hacer un paralelo con lo que deberán ser los planes de Lula para entregar la documentación que acredita la propiedad de los inmuebles y de la tierra que se ocupa.
u Frei Betto también desplegó la mirada típica del proceso brasileño. Aseguró que a los extranjeros les resultó un tanto complicado comprender cómo fue que Lula llegó al gobierno. Claro para darles una ayuda, él mismo dijo que “en el movimiento social del Brasil tuvieron más influencia las ideas de Paulo Freire que las de Carlos Marx”. En alguna medida esto también les dio un espacio a los teólogos de la Liberación, dijo. Otra impronta propia de los pentacampeón, según su definición, es que “en Brasil hay cinco esferas que son autónomas y complementarias: social, pastoral, sindical, organizaciones no gubernamentales y las administraciones provinciales progresistas”. La aparición de cada una de ellas marcó un momento de la historia de Brasil. Ninguna de ellas fue eclipsada, ni coptada por la aparición del PT.
u En su visión, Betto sostuvo que “la caída de Muro de Berlín en Brasil sólo afectó a los académicos y teóricos y no a los integrantes del movimiento social del Brasil”. En este punto aseguró que “la izquierda brasileña siempre estuvo ligada a los pobres”. Y la caída de algún modelo estructurado no implica la desaparición del sujeto social que debe realizar los cambios sociales.
u Pretender escuchar a Marina Silva, la actual ministra de Medio Ambiente, fue una tarea imposible. Unos 1500 asistentes obligaron a que las puertas del auditorio se cerraran y que las imágenes se retransmitieran por circuito cerrado. Junto a Silva, en el escenario se encontraba el teórico brasileño Leonardo Boff.
Informe: Gladys Balonga