El paro que concretará hoy el trío sindical conformado por el grupo de la CGT del camionero Hugo Moyano, la porción de la CTA que encabeza Pablo Micheli y el gastronómico Luis Barrionuevo, recibió las críticas del gobierno nacional. “Mientras en el mundo las centrales sindicales reclaman por la desocupación y el ajuste, acá unos pocos dirigentes con ambiciones políticas recurren al bloqueo de rutas y servicios para hacer sentir una medida que no cuenta con el apoyo de la clase trabajadora”, señaló ayer el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina. “Están amenazando a la gente que se pueda transportar de un lugar a otro”, aseguró el senador Aníbal Fernández después de escuchar a Micheli decir que la idea del piquete “de lo que se trata es que los que tengan ganas de ir a trabajar no puedan”.

“Los beneficios que han logrado los trabajadores de 2003 a la fecha fueron gracias a este proyecto político. Que nadie se confunda ni intente confundir. En los momentos de crisis, los que pierden el trabajo son los laburantes, no aquellos dirigentes que hoy ponen sus ambiciones por delante de los reales intereses de los trabajadores”, sostuvo Abal Medina aludiendo a Moyano, Micheli, Barrionuevo y Eduardo Buzzi, el dirigente de la Federación Agraria Argentina (FAA) que anunció su adhesión a la huelga y los piquetes en todo el país. El jefe de Gabinete puntualizó en la misma línea que “Buzzi amenazó con volver al desabastecimiento agroempresario de 2008, Micheli amenaza a los trabajadores que quieran ir normalmente a su trabajo y Moyano deja a miles de ciudadanos con la basura en la calle. Más que un paro, esto parece ser una maniobra de chantaje a toda la población con el único objetivo de posicionarse electoralmente”.

La huelga que impulsan Moyano y Micheli logró sumar a las patronales del campo que ya se habían enfrentado al gobierno nacional en 2008 con el conflicto por las retenciones móviles. Los nuevos aliados de Moyano después de fracturar la CGT y acompañar al kirchnerismo durante casi nueve años son antiguos rivales políticos. Barrionuevo nunca comulgó con el camionero por su cercanía con la Casa Rosada, y Buzzi y los últimos en sumarse, la Sociedad Rural Argentina, fueron también con los que se enfrentó durante el conflicto con el campo. Con Micheli mantienen una disputa por el espacio gremial de larga data.

La medida de fuerza también fue abordada por el ex ministro del Interior. “Las amenazas que he escuchado yo no sé si no son incluso rayanas con el delito”, señaló Fernández, y agregó que “están amenazando a la gente que se pueda transportar de un lugar a otro”, en referencia a los piquetes con los que intentarán impedir que los trabajadores lleguen a sus puestos de trabajo. En el mismo sentido, el senador aseguró sobre la huelga que “si ellos (los dirigentes que la impulsan) entienden que ésa es su forma de resolver el tema, la Constitución la consagra, pero me da la sensación de que la inmensa mayoría no está pensando en ese tema y está abocada a seguir trabajando”. Luego apuntó que “el Gobierno seguirá con todo lo que tenga que seguir haciendo, trabajando todos, como siempre, ante este intento de paro”.

“Nuestra responsabilidad va a estar fundamentalmente en asegurarles a los ciudadanos el transporte y que puedan trasladarse tranquilos tanto en los micros como en los trenes”, destacó el secretario de Seguridad, Sergio Berni, sobre la tarea que intentará desarrollar durante la jornada de protesta. “Aquellos que quieren generar malestar, los cortes y todo lo que estoy escuchando, será su responsabilidad y quedará en la conciencia de ellos”, aseguró el funcionario, y agregó que “muchos organizadores van a generar caos” con los cortes y que “no se puede pelear con la irracionalidad de unos pocos”.