EL PAíS
El menemismo dividido
“Aunque seamos cinco no volvemos al bloque. Nos quedamos para defender nuestras ideas y el espacio que representamos”, aseguró a este diario la diputada menemista Alejandra Oviedo. La frase de la riojana habla a las claras de la sangría que está sufriendo el bloque Azul y Blanco, que aglutina a los más fieros seguidores del ex presidente Carlos Menem, y que se acentuó desde la asunción del presidente Néstor Kirchner.
Anoche, al cierre de esta edición, lo que queda del bloque menemista permanecía reunido decidiendo lo que ya había anticipado Oviedo. El problema para los menemistas ya no era cuántos quedarían –para varios de ellos llegar a la decena era prácticamente una utopía– sino mantener un espacio donde se sientan representados y desde donde actuar casi como opositores a un gobierno del que se consideran “no queridos” y “atacados” por el propio Poder Ejecutivo
Varios menemistas llegaron a reunirse con el actual jefe de bloque , José María Díaz Bancalari, para arreglar la reincorporación. Algunos de los emisarios del Azul y Blanco pidieron espacios en la conducción de la bancada como condición para el retorno. Esto generó entre los más duros la decisión de no regresar. Así las cosas, es casi seguro que el Azul y Blanco tenga casi exclusivamente diputados riojanos.