El ciclo lectivo tampoco arrancará hoy en la ciudad de Buenos Aires, donde los principales gremios docentes –UTE, UDA y Ademys– convocaron a un paro por 48 horas por la falta de vacantes y los problemas en la inscripción online. El ministro de Educación porteño, Esteban Bullrich, calificó la decisión como “una medida absolutamente política” y advirtió que se descontarán los días.

El gobierno de Mauricio Macri ofreció la semana pasada un incremento del 44 por ciento para el salario inicial –que lo llevará a 6150 pesos a partir de septiembre– y un 31 por ciento para el resto de las categorías. No obstante, desde la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) y de la Unión de Docentes Argentinos (UDA) y Ademys llamaron a un paro por 48 horas a partir de hoy.

En el caso de UTE, el sindicato de base de la Ctera, la medida de fuerza está centralizada en la falta de vacantes, el rechazo a la inscripción online y al posible cierre de cursos. Según explicó a Página/12 el secretario general del gremio ceterista, Eduardo López, el sistema implementado por el gobierno porteño “generó que haya chicos sin escuelas y escuelas sin chicos, ya que no las ofrecieron en el sistema online”. “No podíamos empezar las clases haciéndonos los distraídos con siete mil chicos afuera”, puntualizó.

Ante esta amenaza de cierre de cursos por no haber aparecido como opción durante la inscripción, los docentes irán mañana a la Legislatura porteña, en ocasión de la primera reunión del año de la Comisión de Educación, para “visibilizar las escuelas que tienen vacantes”. “Vamos a llevar las vacantes disponibles en las escuelas públicas y también llevaremos la lista de edificios ociosos que puedan servir como escuelas en el corto plazo”, explicó López.

El dirigente gremial también aclaró que el paro estará exclusivamente enfocado a “apoyar a los padres que no tienen vacantes” para sus hijos. En lo que respecta a la propuesta salarial del gobierno porteño, López sostuvo que los porcentajes y los montos “son cercanos” a lo que plantean desde los 17 sindicatos docentes porteños, pero que aún no concuerdan con los plazos. En la misma línea se había expresado el lunes el dirigente de Ademys, Néstor Dimiglio. “Estamos en desacuerdo porque recién es para marzo, para cobrar en abril”, indicó.

Bullrich criticó ayer la decisión de los maestros de parar 48 horas y sostuvo que “la impresión es que le quieren hacer un paro a Macri y nada más”. El ministro de Educación porteño descalificó a UTE, al que definió como gremio “kirchnerista” y advirtió que “se van a descontar los días” a los docentes que adhieran a esta medida de fuerza. “Estamos sorprendidos porque hemos hecho un esfuerzo con la plata de todos los porteños para dar un muy buen aumento, por encima de otras provincias que no tienen paro”, afirmó el funcionario. “No hacen paro por los 635 mil niños de 3 a 5 años que no van a la escuela en el país, no hacen paro por los contenedores que se usan en Córdoba o Santiago del Estero”, protestó.

Para Bullrich, los docentes “están tomando una medida absolutamente política hablando de un tema que no es nuevo”. “Desde los cuatro años para arriba, todos tienen vacante; dicen que el paro es por el tema de las vacantes, de las aulas modulares que ellos llaman contenedores”, sostuvo el ministro porteño y añadió: “Lo que se está diciendo en realidad es que no se está de acuerdo con una política”. Además, el funcionario macrista consideró que “hay una clara intencionalidad de marcar una diferencia cortando un plazo de dos años sin paro docente”.

Tras la medida de fuerza convocada para hoy y mañana, las clases en la Ciudad comenzarán el próximo viernes y los docentes leerán ese día un documento “en defensa de la escuela pública”.

Informe: Aldana Vales.