La consultora Public and Corporate Affairs se ocupó de las expropiaciones más pequeñas y conflictivas. Los negocios más grandes, como los situados en Santa Fe y Pueyrredón, llegaron a un rápido arreglo con el gerente de Legales de Sbase, Juan Freire Aurich. ¿Cómo logró esto? Porque, tras cobrar el dinero de la expropiación y una vez que concluyan las obras, les devolverán el terreno restante para que lo usen como les venga mejor. Para esto, Sbase dispuso de expropiaciones parciales de los terrenos. “La ley no habilitaba las expropiaciones parciales”, advirtió el auditor kirchnerista Eduardo Epszteyn, quien recordaba que cuando se discutió en la Legislatura la ley de expropiaciones, se planteó que el resto de los terrenos se utilizaran para generar lugares destinados a la educación, la salud o espacios verdes. Por decisión de Sbase, seguirán en manos de los privados.