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El hospital que inauguró la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en El Calafate es de última generación y fue financiado por la Subsecretaría de Obras Públicas, que depende de la Secretaría de Obras Públicas de la Nación. Implicó inversión del Estado nacional de 495 millones de pesos más otros 615 millones de pesos en obras complementarias.

La Presidenta recorrió las instalaciones del hospital acompañada por el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, y el intendente de El Calafate, Javier Belloni, entre otras autoridades. Está ubicado en un predio ubicado al este de El Calafate, cerca de la Ruta Provincial 11, principal acceso a la villa turística y que lo vincula al aeropuerto de la ciudad, con una superficie total de 29.160 m2 y 16.973 m2 cubiertos.

Cuenta con 100 plazas de internación, recepciones y esperas de consultorios externos, laboratorios, imágenes y áreas de emergencia y áreas quirúrgicas, terapia intensiva y neonatología. También fue montada una unidad de emergencia con camas frías de hasta 100 pacientes para casos de eventuales situaciones de catástrofe.

El secretario de Obras Públicas de la Nación, José López, afirmó que el hospital “es de alta complejidad, con toda la aparatología moderna para este tipo de establecimientos modernos y que estará conectado en red con otros del país”. El funcionario remarcó “la importancia de las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner, que se iniciaron hoy, y que, como dijo la Presidenta, tendrán que estar listas exactamente en 5 años, un 15 de febrero”. La Presidenta firmó con el representante de la empresa china Gezhouba, Hu Zmijun, y el ministro de Planificación Federal, Julio De Vido, los convenios para poner en marcha esa obra de aprovechamiento hidroeléctrico del río Santa Cruz, que incluye las dos represas.

Durante su reciente visita a la República Popular de China, donde mantuvo un encuentro bilateral con su par Xi Jiping, las autoridades del país asiático concretaron el primer desembolso para los emprendimientos por una suma cercana a los 300 millones de dólares, en un acuerdo rubricado por el ministro De Vido.

La obra total tiene un plazo de 66 meses para su realización, una inversión de 4714 millones de dólares y prevé una generación anual de energía estimada en 5000 gwh/año, lo que cubre un 4 por ciento e la demanda anual y equivale a 1.500.000 hogares del país.

También prevé el ahorro anual en términos de sustitución de combustibles líquidos para generación eléctrica en 1100 millones de dólares. La potencia instalada total de ambos emprendimientos es de 1740 mw, distribuidos entre la represa Néstor Kirchner que tendrá una potencia de 1140 mw, por seis turbinas tipo “Francis”, de 190 mw cada una. En tanto, la represa Jorge Cepernic tendrá una potencia de 600 mw, por cinco turbinas tipo “Kaplan”, de 120 mw cada una.

El financiamiento ofrecido por el consorcio cubre el 100 por ciento del costo de la obra, incluyendo impuestos, mientras que el plazo de pago es de 15 años con 5 años y medio de gracia para el capital. Este proyecto ha sido adjudicado en agosto de 2013 al consorcio conformado por las empresas China Gezhouba Group Company Limited y la local Electroingeniería SA, que tendrán un plazo de ejecución de 5 años.