EL PAíS
Una propuesta con poca oposición
- Héctor Polino, diputado socialista: “Es un acierto la propuesta de la doctora Carmen Argibay para integrar la Corte Suprema de Justicia, porque reúne las condiciones de idoneidad, compromiso democrático y solvencia intelectual para tan importante cargo. Un aire fresco comienza a oxigenar el máximo tribunal de justicia de la Nación, viciado y enrarecido por maniobras que lo pusieron al servicio del despojo del patrimonio público y la corrupción”.
- Gregorio Badeni, constitucionalista, abogado de Julio Nazareno y Moliné O’Connor: “Yo siempre consideré que los cargos públicos están para ser cubiertos y no para que se mantengan vacantes. Con respecto a la propuesta del Presidente me parece muy buena y pienso que ponderó las cualidades y los antecedentes de Carmen Argibay para elegirla. Quizás me hubiera gustado más que Kirchner la hubiera designado directamente requiriendo el acuerdo del Senado. Es decir, que el debate se desarrollara en el Cámara alta y no en la forma que lo dispone el artículo 222 donde el presidente no asume ninguna responsabilidad política. Además con esta forma de elección se terminan formulando objeciones infundadas, como ocurrió con Zaffaroni, que terminan deteriorando la imagen pública del elegido. Con respecto a que la elegida sea una mujer, considero que no debe tomarse como una reivindicación de género ya que en la Corte Suprema deben estar los más idóneos y eso no pasa por el sexo. Puede haber nueve mujeres o nueve hombres que si son idóneos será correcto. Por otro lado, tampoco me parece justo cuestionar que Argibay sea penalista igual que Zaffaroni. Aquí hay un error, la especialidad no descalifica a nadie. Creo que el primer requisito es que sea un excelente clínico jurídico. Si esto es así necesariamente tendrá una especialidad y, al mismo tiempo, un conocimiento general del derecho muy superior a otras personas. Por eso insisto con que el tema de la especialidad es algo totalmente secundario”.
- María Elena Barbagelata, diputada socialista: “Es una excelente jurista que además reúne todas las calidades humanas imprescindibles para ocupar el alto cargo en el Superior Tribunal. Para las mujeres es una excelente representante porque en su larga trayectoria la doctora Argibay ha demostrado sensibilidad y un compromiso de lucha por la no discriminación a través del derecho”.
- Norberto Borzese, titular del Foro Social de la Transparencia: “Destaco la apertura de género en la propuesta del gobierno de Carmen Argibay, una persona de excelentes antecedentes. Me gustaría sugerir, además, que para la próxima designación en la Corte se tenga en cuenta al constitucionalista Daniel Sabsay, una figura independiente que representa a las organizaciones del tercer sector”.
- Marcela Rodríguez, diputada del ARI y presidenta de la Comisión de Acusación del Consejo de la Magistratura: “La Dra. Carmen Argibay es un ejemplo de la gran cantidad de mujeres que reúnen idoneidad técnica y moral, honestidad e independencia de criterio y antecedentes de lucha por el estado de derecho y la democracia. Además de contar con una reconocida trayectoria como jurista que es reconocida internacionalmente, es notorio su compromiso con la defensa de los derechos humanos y con la igualdad entre varones y mujeres. Espero que las próximas vacantes también sean cubiertas por una mujeres que reúnan estas condiciones para revertir la situación de exclusión de las mujeres en el Alto Tribunal”.
- María José Lubertino, ex diputada socialista): “Estamos muy contentas con la elección del Presidente. Cuando me entrevisté con el secretario de Justicia para presentarle mi proyecto parlamentario para que hubiera mujeres en la Corte, el nombre de Argibay fue uno de los que le manifesté. Desde los distintos ámbitos, como el Instituto Social y Político de la Mujer, vamos a apoyarla. Pero además aspiramos a que esta primera mujer en la Corte en esta etapa, no se transforme en la última. Carmen Argibay es una persona reconocida por su trayectoria jurídica pero además es una militante de los derechos de las mujeres. Por ese motivo, muchas asociaciones de mujeres ya la habíamos impulsado para que integre el Tribunal Penal Internacional de La Haya. Otra cuestión es que la Corte no sólo debe cumplir el rol de máximo tribunal del sistema jurídico sino también el de administración. En ese sentido, ella es una gran administradora y va a poder aportar sus condiciones de persona práctica para poner orden en el desgobierno del Poder Judicial”.