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La secretaria del ex jefe de la SIDE Fernando de Santibañes, Gladys Mota, presentó una carta ante el juez Rodolfo Canicoba Corral en la que solicitó ser sometida a un careo con el arrepentido Mario Pontaquarto.
La mujer, a través de su sobrino, entregó una hoja manuscrita en la que aseguró que el ex secretario parlamentario “mansilla (sic) gratuitamente mi honor, y mi familia y yo no podemos encontrar la tranquilidad necesaria para sobrellevar las dificultades a las que la vida me sometió”. El magistrado no tiene previsto ordenar inmediatamente el careo entre Mota y Pontaquarto. Es que la situación de la mujer se complicó porque la SIDE informó que ella era la única Gladys que trabajaba en la época de De Santibañes en el organismo.
El lunes cuando declaró como testigo la secretaria del empresario negó haber visto en la SIDE a Pontaquarto. Cuando se le exhibió un registro de la secretaría en el que figuraba que “Gladys” había recibido al ex secretario parlamentario el 22 de agosto de 2000, afirmó que no era ella y que podría tratarse de una telefonista.
Con el informe de la SIDE, que afirma que ella era la única empleada con ese nombre, sumado a las contradicciones que se desprenden de su declaración, la mujer será denunciada por falso testimonio, igual que el chofer de De Santibañes, Alberto Ruidía. Pontaquarto afirmó que el 18 de abril de 2000 por la noche, Gladys le entregó en una valija, un maletín y una caja los cinco millones de pesos destinados al pago de coimas a los senadores.