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Mientras el gobierno de Aníbal Ibarra se alista para la recolección de las 500 mil firmas necesarias para convocar al referéndum en caso de que el Tribunal Superior no apruebe su eximición, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela Carlotto, negó que haya sido confirmada la participación del organismo en dicha iniciativa. “Nosotros no hacemos campaña política”, sentenció Carlotto a Página/12, luego de ratificar, sin embargo, su apoyo al mecanismo de la consulta popular.
“Esto servirá para que la gente que lo votó ratifique su apoyo y a partir de eso, se pueda construir el verdadero camino para buscar responsabilidades”, evaluó Carlotto. Y agregó: “Si lo dispone el jefe porteño y tiene las facultades para hacerlo, será una buena forma para evaluar el pensamiento de los porteños. Supongo que él evaluó que si se queda (sin convocar a plebiscito), le espera una lucha política permanente”.
El apoyo de Abuelas de Plaza de Mayo a la gestión de Ibarra quedó cristalizado semanas atrás cuando el organismo, junto con otras 150 ONG, dio a conocer un comunicado en donde se oponían a la interpelación en la Legislatura, calificándola como “golpe institucional”. Frente a las críticas que recibieron por parte de diversos sectores, que concibieron al gesto como producto de una instrumentación política del ibarrismo, Carlotto contestó: “Nosotros denunciamos que a Ibarra se lo estaba usando como chivo expiatorio por varios partidos. No fue nuestra intención defender una política partidaria sino la democracia”. En este sentido la dirigente remarcó su intención de evitar toda especulación partidaria y afirmó: “Nosotros, los organismos de derechos humanos, hacemos lo que creemos. Nunca hemos sido usados por ningún sector”.