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La mirada de Joan Manuel Serrat sobre la Argentina no ha sido lejana ni superficial, al menos en los últimos treinta y cinco años. Cuando el músico catalán se refiere a este país, al que tantas veces señaló como su segunda patria, sus palabras adquieren mayor resonancia. Ahora, la situación económica y política que se vive aquí precipitó en él una sensación que parece mezclar bronca y hastío: “Argentina es un país en el que siempre se está en el peor momento”, señaló. Serrat habló ayer en Madrid de este tema con medios de todo el mundo, durante la presentación de su próxima gira, Versos en la boca, que en enero lo traerá al país.
El autor de “Penélope” fue específico a la hora de focalizar las causas que llevaron a la Argentina a estar como está. “Esto es producto de la corrupción y de factores externos que van allí como rapaces a llevarse todo lo que pueden.” No evitó referirse a la rigidez que evidencian los organismos financieros internacionales. “Lo de Argentina está en estos momentos tan mal, que hasta el Fondo Monetario Internacional está replanteándose su política de cobro”, dijo el cantautor. Las noticias sobre la desnutrición que se sufre en muchas provincias argentinas lo conmovieron muy especialmente, aunque no lo sorprendieron: “Los niños de Tucumán siempre se han muerto de hambre. Lo que pasa es que lo que no sale en la tele parece que no existe”, comentó el catalán. Por último, Serrat, añadió una frase que pinta el escepticismo que lo domina: “La especie humana sigue empeñada en repetirse y no lo corrige”. Una de sus últimas canciones se llama “Africa”. “Es el reflejo más brutal de las miserias del primer mundo, como ocurre con Asia o Latinoamérica. Tres centros de explotación mundial”, señaló.
Serrat comenzará hoy en Madrid una serie de seis conciertos. Allí mostrará las canciones de Versos en la boca, su más reciente cd, e interpretará una selección de sus mejores clásicos. Después de estos shows, girará por las ciudades españolas donde aún no ha presentado el disco. El cantante confirmó que viajará en enero próximo a Argentina, Uruguay, Chile y Perú. Luego se tomará un descanso, y en abril abrirá en México un nuevo tramo de la gira, que lo llevará por Venezuela, Colombia, Estados Unidos y varios países de Centroamérica.
El músico define su nueva producción discográfica como acústica, aunque aclara: “No me atrevería a colocarle la etiqueta de ‘unplugged’”. El músico se está presentando en España “con formato de quinteto acústico con guitarra y bajo eléctrico” en los que alterna “aquellos temas de siempre que han encajado bien” con los de Versos en la boca, del que ha vendido ya cien mil copias. El cantante dijo que para este disco volvió a escribir, como siempre, “en función de lo que veo, siento y toco”, y por eso el álbum contiene títulos como “Qué será de mí”, “Muñeca rusa”, “Los recuerdos”, “De cuando estuve loco”, “Señor de la noche” o “La bella y el Metro”. En cuanto a este último tema, Serrat agregó: “Viajo en el metro (subte) y es un mundo totalmente intenso, con una gran densidad de gente y a la vez anónimo. Es como un ascensor en el que nadie se habla, pero a lo bestia”.