ESPECTáCULOS
El adiós de Alfredo Zalce
El pintor y escultor Alfredo Zalce, uno de los últimos sobrevivientes del movimiento muralista mexicano, murió el domingo en su casa de la ciudad de Morelia. El artista, quien recibió el Premio Nacional de las Artes en 2001, falleció a los 95 años a causa de una insuficiencia cardíaca, después de que su salud se agravara en diciembre por un derrame cerebral. Zalce perteneció a la generación de Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y José Clemente Orozco, quienes dieron vida al llamado movimiento muralista, que reflejó la problemática social a través de pinturas de gran formato. Su obra se encuentra en varios museos de Europa, como el de Varsovia (Polonia), Sofía (Bulgaria) y Estocolmo (Suecia), y uno de sus murales adorna el Museo Nacional de Antropología de la capital mexicana. En sus últimos años, el pintor, cuya actividad no mermó en sintonía con su edad, se había dedicado a la práctica del “batik”, popularizada en los años 70 cómo técnica para grabar diversos diseños en la ropa. Zalce fue también uno de los grandes grabadores mexicanos, con trabajos en zinc, bronce, madera y linóleo. Su muerte se sumó en el imaginario mexicano a la de su contemporáneo José Chávez Morado, el pasado 1º de diciembre, lo que dejó prácticamente sin sobrevivientes al movimiento muralista mexicano.