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Es extraño ver a una modelo desenvolverse con soltura al frente de un programa de televisión. Más extraño aún es que esa misma persona haga las veces de actriz, artista plástica y diseñadora de ropa, con marca propia incluida. Y mucho más si a esas tareas se les suma el duro trabajo de ser madre de dos hijos a los veintipico y de cargar con la pesada mochila de ser la hija de una de las máximas figuras del rock nacional, Luis Alberto Spinetta. Un caso atípico. Sin embargo, Catarina Spinetta se hace cargo de lo que le tocó vivir. “La clave es ponerle a todo mucha onda”, subraya, como si esa energía positiva fuese suficiente para converger en una misma persona tantas actividades. Así, la ex VJ de MTV se encuentra en estos momentos embarcada en tres proyectos a la vez. Diariamente se la puede ver en la pantalla del 13 interpretando a Brenda en Los pensionados, mientras que en la misma emisora oficia de guía nocturna en Copynight, el microprograma que se emite viernes y sábados después de la medianoche. Por último, Spinetta Jr. se encuentra a punto de exponer sus cuadros en el Centro Cultural Recoleta, a partir del 9 de marzo, junto al grupo de arte plástico Orgánico, del cual forma parte. Demasiada tarea.
Acompañada en cada programa por un famoso que cuenta cómo disfruta de la noche, en Copynight Catarina se interna con dos cámaras en los lugares más calientes de la movida nocturna de Buenos Aires, Punta del Este y de ciudades de la costa atlántica argentina. Lo interesante de la visión que propone el ciclo de esos ambientes en los que la consigna es divertirse es que no fuerza las costumbres con tal de captar una imagen impactante o extraña. La cámara, más bien, se desliza siempre como simple espectadora omnisciente de lo que ocurre en un bar, un boliche o un restaurante, sin interponerse ni inhibir hábitos de la vida nocturna. “La pretensión del ciclo es ser una especie de guía televisiva nocturna que inspire a la gente a salir a divertirse”, apunta Spinetta.
–¿Cómo mostrar la noche sin caer en el estereotipo?
–Mostrando de todo, no quedarse sólo con la parte “loca” de la noche. Si bien siempre hubo programas sobre la movida nocturna, por lo general se apuntaba a ir a los boliches top de distintas ciudades. Copynight es un ciclo más abarcativo. Recorremos desde restaurantes y bares hasta discos, eventos y fiestas de todo tipo. No elegimos a los lugares por ser fashion, también vamos a clásicos como Sunset, o mostramos restaurantes de comida específica, como la vietnamita. La idea es llevarles a los televidentes la amplia gama de opciones que tiene Buenos Aires y otras ciudades cercanas para divertirse y pasar un buen momento.
–¿Salen a la noche a “ver qué onda” o tienen una pauta rígida?
–Hay una pauta profesional, porque hay invitados que tienen un tiempo y no toda la noche. Pero todo es muy frenético, como la noche misma. Hemos grabado hasta 4 programas por noche, cambiándome arriba de una camioneta, porque noté que no se puede ir a todos los lugares con la misma ropa si se quiere pasar desapercibido. Pero si pinta una situación copada o que no estaba en los planes, la grabamos y desechamos lo pautado. No es muy rígido, porque efectivamente uno no sabe con qué se va a encontrar.
–En pantalla se percibe esa sorpresa, cierta frescura.
–Claro, porque uno cree conocer la noche, pero es un mundo infinito. Voy a lugares donde me siento totalmente ajena, con los que no me identifico, y está bueno porque ahí se ve el efecto sorpresa. No hay una mirada juzgadora sobre lo que pasa. Tiene la frescura del momento, mostramos cómo se divierte la gente. Y en este tiempo noté que a la gente le gusta mostrar los lugares en los que se divierte, esa pretensión de que el otro se cope en el lugar en el que uno la pasa bien.
–¿Es pesada la mochila de ser la hija de...? ¿La perjudicó o la favoreció en su carrera?
–Yo soy Cata. Mucha gente me dice la hija de... y otros me llaman Cata. Pero a esta altura no me molesta: yo me siento segura como artista. Además, tengo un viejo que es famoso por algo bueno. Es un orgullo paramí. Es obvio que cuando entré a MTV cerraba que en un canal de música fuera la hija de Spinetta. Pero después yo me esforcé para estar dos años en pantalla. Creo que hasta me gusta que me digan que soy la hija de Spinetta porque mi viejo es lo más. No tengo dudas de eso.