Miércoles, 4 de julio de 2012 | Hoy
LA VENTANA › MEDIOS Y COMUNICACIóN
Marcos Muñoz problematiza la necesaria complementariedad entre los medios de información y la universidad en función del servicio a la sociedad.
Por Marcos Muñoz *
¿Merece la ciudadanía tomar conocimiento de las propuestas extensionistas que impulsa la facultad de una universidad nacional? ¿Cuál es la función social de los medios de información respecto de las propuestas que ofrece la universidad pública? ¿Es deber de una Secretaría de Extensión informar sobre cursos, seminarios, proyectos en marcha, entre otras propuestas, a la comunidad? ¿Qué hacer cuando un medio excluye de su agenda propuestas que son pensadas desde la universidad para la integración con la comunidad?
Transitar los aspectos centrales de la ley de medios de la democracia aporta en seguir teniendo presentes los pilares de un debate que se alimentó con propuestas que surgieron desde todo nuestro país. A lo dicho, un antecedente casi inmediato: el papel de actor político clave que jugaron los grupos concentrados info-comunicacionales en 2008 con la ya conocida Resolución 125. De 2008 a esta parte, a raíz del conflicto mencionado, se percibe un marcado compromiso de infinidad de actores provenientes del mundo de la comunicación –como de otras disciplinas– que aportan a diario análisis y miradas valiosas en torno del papel que protagonizan los medios de información en la construcción de la noticia y sus posibles impactos en la opinión pública y en nuestras subjetividades. En ese marco, no se agota el debate del papel de los medios en la construcción de una agenda con características más inclusivas. La complejidad de los análisis posibles suma nuevos desafíos.
Retomo, en consecuencia, en este contexto y con el ánimo de hacer del debate una herramienta valiosa. ¿Merece la ciudadanía tomar conocimiento de las propuestas extensionistas que impulsa una facultad? ¿Cuál es la función social de los medios respecto de las propuestas que ofrece la facultad de una universidad pública? ¿Entra en la agenda de los medios la información sobre los cursos de extensión, los seminarios, los proyectos en marcha en las universidades, las propuestas de éstas a la comunidad? ¿Qué hacer cuando un medio excluye de su agenda propuestas pensadas para integrar la universidad y la comunidad? Usted, ¿qué haría?
Desde mi experiencia como comunicador social al frente de la Secretaría de Extensión de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional del Comahue, quiero hacer un aporte en este sentido. La función social de una Secretaría de Extensión incluye mantener informada a la ciudadanía de las diversas propuestas de la universidad. Los distintos espacios que ofrece una Secretaría de Extensión para la socialización del saber y la construcción de conocimiento de manera integrada con otros actores sociales hablan de una universidad pública que intenta demostrar en la acción su interés por ser parte de las discusiones y algunas soluciones de este presente. También revertir lo que aun a veces se percibe como resabios de una cultura individualista. Estamos todos interrelacionados. Es importante que entendamos que nadie puede nada solo y que la concentración de decisiones en un solo actor atenta contra la pluralidad de voces, tanto en un medio de información como en cualquier institución.
Valoro los medios de información y rescato las numerosas intervenciones que han permitido esclarecer o acompañar reclamos justos que emergen en nuestra sociedad. Propongo que los medios gráficos, por ejemplo, generen espacios en que la ciudadanía tome conocimiento de lo que ofrece la extensión universitaria. Porque una Secretaría de Extensión es un puente necesario entre universidad y sociedad. Y para que la universidad y la sociedad se encuentren necesitamos de los medios.
* Licenciado en Comunicación Social, Universidad Nacional de Cuyo (Mendoza). Secretario de Extensión de la Facultad de Humanidades - UNComahue.
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