Miércoles, 7 de mayo de 2014 | Hoy
LA VENTANA › MEDIOS Y COMUNICACIóN
Desde Jujuy, Marcelo Brunet y César Arrueta presentan su reciente libro, Escrito en papel, en el que intentan recuperar la producción periodística local y su aporte a la perspectiva territorial.
Por César Arrueta y Marcelo Brunet *
Desde Jujuy
Existe consenso en afirmar que el periodismo es un actor político de especial influencia. Bibliotecas completas se escribieron sobre el rol que cumple en las sociedades modernas y hasta existen aquellos que le cargan culpas y responsabilidades insólitas. ¿Acaso las acusaciones sobre el fin del conocimiento y el triunfo de la frivolidad no son una aseveración exagerada?
Lejos de adentrarnos en la polémica, diremos –para el caso– que el periodismo es un actor de inevitable lectura. Está presente en contextos diversos y su figura es referencia renegada en cualquier discusión. Tal vez es la configuración de esta sociedad del espectáculo y la democracia deliberativa mediática la que acentuó el fenómeno.
Sin embargo, el periodismo está sometido a una triste paradoja. Tan rápido como escribe y problematiza la realidad, sus textos tienen un valor cada vez más efímero, veloz. Se pierden en la complejidad de la actualidad y yacen en ese estado bajo la sombra de la novedad permanente. El poeta Jorge Calvetti describió este sentimiento desde una estética de la calle: “el diario, ayer, latía con el pulso del mundo, y ahora lo veo envolviendo fruta, arrugado (...) Y con ellas, volando hacia la nada nuestros pobres, aturdidos destinos”.
No es descabellado suponer que la mayoría de los aportes y las reflexiones de la prensa estén expuestas a perderse en el camino del tiempo. Especialmente en provincias como Jujuy, donde no existe una política prolija de conservación de archivos. Entonces se impone la siguiente pregunta: ¿cómo leer esos textos?, ¿cómo recuperarlos y ponerlos en valor por fuera de las demandas de la actualidad?
Estas inquietudes son las que motivaron en nosotros la edición del libro Escrito en papel. Antología del periodismo jujeño (Ediciones DASS-UCSE). Se trata de una obra que recopila arbitrariamente los escritos de una veintena de periodistas locales. Podríamos decir, sin miedo a equivocarnos, que es un esfuerzo por superar la invisibilidad de los/as trabajadores/as de la gráfica y poner en valor sus textos. Es una oportunidad para mirar los lugares de enunciación de los precursores del campo, pero también de aquellos que trabajan en el ahora.
Un ejemplo de este propósito es el caso del primer periodista jujeño, Macedonio Graz. Abogado y prolífero funcionario público, fundó en 1856 el periódico El Orden. Desde allí libró las primeras batallas de sentido en la patria chica y su imagen es sinónimo de emprendedurismo periodístico. Sin embargo, ¿es posible leer su obra en la actualidad? ¿Cuál es el grado de accesibilidad? Limitado. Puede resultar una odisea hacerse de sus trabajos para intentar leerlos en coordenadas de espacio-tiempo. Se hacen homenajes, pero descubrir esas viejas hojas del periódico es una tarea compleja.
En este contexto, Escrito en papel... es un esfuerzo para acortar distancias e insinuar una lectura asequible. Es un intento, discreto, por anclar memoria colectiva y sumar matices a la discusión. “¿Qué discusión?”, podría preguntarse algún distraído. La discusión acerca de la prensa, los periodistas y sus derivaciones reales en el espacio público. Nos negamos a creer que la agenda deba leerse al unísono de los casos conmocionantes. Es un deber de la academia volver, las veces que sean necesarias, al polvo del pasado para entender el presente.
Por ello, recuperar los textos periodísticos y ponerlos en circulación también es una forma de leer aquella primera versión apresurada que los medios escriben de la historia. Un recurso para pensar en contexto local, comparar visiones y hasta replantearse algunas ideas que el tiempo ya naturalizó.
De eso trata el libro: de recuperar lo local, lo específico y significativo del territorio, acudiendo a los textos periodísticos y con ello, haciéndolos palpables, vivos al tacto.
Detrás del producto hay un esfuerzo silencioso: lectura de archivos, entrevistas, reconstrucciones biográficas y análisis contextual. Hay un pequeño equipo de trabajo con estudiantes y docentes, quienes tomaron la tarea como proceso de entre-aprendizaje. Podemos decir que es un aporte desde la lejanía del norte del país. Pequeño, moderado, pero valioso para nuestras propias expectativas y deseos. El libro, producto del Centro de Investigación Luis Ramiro Beltrán de la UCSE sede Jujuy, es una forma de saldar deudas académicas.
Para el cierre, vale una aclaración: contar una experiencia periférica de esta naturaleza en las páginas de este diario de alcance nacional no pretende transformarse en una estrategia de difusión. Por el contrario, es una acción militante en favor de las pequeñas cosas, aun sabiendo que podrá terminar en la calle o cubriendo alguna que otra fruta.
* Docentes e investigadores de la Universidad Nacional de Jujuy y de la Universidad Católica de Santiago del Este (sede Jujuy). Autores del libro de reciente aparición Escrito en papel. Antología del periodismo jujeño.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.