Jueves, 19 de marzo de 2009 | Hoy
SOCIEDAD › DESPENALIZACIóN, DESPUéS DE VEINTE AñOS DE PROHIBICIóN
“Estamos en el siglo XXI y no en la Edad Media y, por lo tanto, aquí no hay ningún tema tabú”, declaró el precandidato presidencial de la Concertación (y actual senador por la Democracia Cristiana) Eduardo Frei y encendió la mecha para un explosivo debate público en torno de la despenalización del aborto terapéutico en Chile. Tal fue el impacto de sus palabras, vertidas el domingo, que un día después el presidente de su partido, Juan Carlos Latorre, aclaró que la DC rechaza el aborto terapéutico y que Frei –quien presidió el país entre 1994 y 2000– nunca se ha manifestado en contra de eso. El martes, la sorpresa vino de la mano del propio presidente de la Conferencia Episcopal, Alejandro Goic, quien se mostró abierto a que el estatuto legal del aborto sea discutido públicamente. En Chile, la interrupción voluntaria del embarazo fue prohibida en 1989, hacia el fin de la dictadura de Augusto Pinochet.
Mientras en España (a raíz de la ampliación del plazo para practicarlo, una reforma legal auspiciada por el presidente Rodríguez Zapatero) y Brasil (porque la Iglesia local se apresuró a excomulgar a una mujer que pidió, y logró, el aborto para su hija de 9 años, embarazada tras una violación) la controversia crece diariamente, Chile inicia el que será un año electoral –se vota presidente en diciembre– discutiendo uno de sus temas de salud pública más candentes, habida cuenta de que se trata de uno de los países latinoamericanos con las tasas de interrupción del embarazo más elevadas de la región.
Oficialistas y opositores aprovechan el tema para establecer posiciones. La derecha se encuentra claramente dividida. Mientras Sebastián Piñera –miembro de Renovación Nacional, que integra la coalición Alianza– se pronunció a favor del diálogo a condición de que las opiniones se expresen con claridad, dos diputados de su partido –ambos médicos– apoyaron la legalización ante la oposición de compañeros de coalición de la propia RN y la ultraderechista Unión Demócrata Independiente. Con apoyo del Partido Socialista y el Radical, los diputados del oficialista Partido por la Democracia presentaron un proyecto para permitir la interrupción del embarazo en caso de riesgo para la madre.
Aun cuando las estadísticas oficiales registren 40 mil, se estima que son cerca de 160 mil los abortos clandestinos que se practican cada año en Chile, de acuerdo con expertos en salud reproductiva. Ese número significa una tasa de 50 intervenciones por cada mil mujeres en edad fértil, una proporción muy superior a países como Alemania, Bélgica y Holanda (donde es legal): diez casos por cada mil.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.