La Legislatura porteña podría aprobar antes de fin de año la creación de un sistema que centralice la asistencia, de manera integral, a todas las personas en situación de vulnerabilidad social que vivan en la ciudad, y le otorgue a cada familia beneficiaria una libreta de ciudadanía. El sistema incluye, además de la asistencia alimentaria y económica, la promoción de los derechos de los niños y niñas, de los adultos mayores, de las mujeres y de las personas con discapacidades. Se trata de una iniciativa presentada por la diputada Gabriela Cerruti, del bloque Nuevo Encuentro, pero que cuenta con el apoyo de legisladores del oficialismo y de la oposición, así como de la ministra de Desarrollo Social de la gestión PRO, María Eugenia Vidal.

No se trata de crear un nuevo programa social sino de unificar los existentes en uno solo. “El objetivo es conformar un único padrón de beneficiarios, una única ventanilla para atender la demanda en materia de asistencia social”, explicó Cerruti, autora del plan Ciudadanía Porteña, hoy vigente, durante su gestión como ministra de Desarrollo Social de la gestión de Jorge Telerman como jefe de Gobierno. “Mientras el Ciudadanía Porteña consiste en un aporte alimentario, este programa incorpora respuestas a otras demandas, como asistencia gerontológica o becas escolares, con un legajo único para cada familia”, aclaró la legisladora a Página/12.

El proyecto de ley, que ya se debate en la Comisión de Desarrollo Social, establece la creación del Sistema Unico de Garantías de los Derechos Humanos y Sociales para los ciudadanos porteños, con el fin de garantizar el acceso a las prestaciones sociales a las personas en estado de vulnerabilidad social. El programa incluye a las personas con necesidades especiales, a los que están en situación de calle y a las que se encuentran en situación de vulnerabilidad por su condición etaria, lo que incluye a niños, adolescentes y ancianos.

De aprobarse, la propuesta pondrá en vigencia un sistema de corresponsabilidades por parte de los beneficiarios, por el cual se comprometen a cumplir con una serie de contraprestaciones que pueden consistir en talleres de capacitación, realizar alguna tarea con fines sociales o comunitarios, acreditar cada tres meses que los niños van a la escuela o efectuarse al menos un control de salud anual, en el caso de los adultos mayores.

A los efectos del control del programa, cada grupo familiar contará con una Libreta de Ciudadanía, donde van a figurar tanto las prestaciones recibidas como las corresponsabilidades asumidas por los beneficiarios.

“El sistema centralizado va a contribuir a transparentar las prestaciones y a que no haya superposiciones de programas mientras otras familias se quedan afuera de la ayuda”, destacó Cerruti. Con respecto a los controles, el programa contará –según el proyecto– con un monitoreo interno y uno externo. El primero estará a cargo del propio Ministerio de Desarrollo Social. El externo, en manos de instituciones públicas con las cuales el gobierno firme convenios.

Los programas sociales han sido uno de los puntos más cuestionados de la gestión de Mauricio Macri. Si bien mantuvo el programa Ciudadanía Porteña, recortó el alojamiento en hoteles de personas en situación de emergencia habitacional, justo en un momento en que crecieron los desalojos de inquilinos y ocupantes de viviendas. También han sido cuestionadas las políticas del Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes.

El proyecto de Cerruti sostiene en sus fundamentos que en la ciudad “existe una multiplicidad de organismos, planes, programas y acciones específicas en materia de asistencia social y una dispersión de normativas que no sólo dificultan al ciudadano el acceso a las prestaciones ofertadas, sino que también restan eficiencia y eficacia al sistema”.

La iniciativa será presentada públicamente hoy en una mesa de trabajo de la Comisión Especial de Políticas Públicas para la Ciudadanía Plena, al mediodía, en el Salón Intersecretarías de la Legislatura. Además de Cerruti y de la ministra Vidal, participarán las diputadas María Eugenia Rodríguez Araya y Carolina Stanley, ambas del PRO, y el director de Ciudadanía Porteña de la gestión macrista, Pablo Pucciarelli.