SOCIEDAD › LA POLICíA DE MACRI REPRIMIó A UN GRUPO DE VENDEDORES AMBULANTES LUEGO DE SECUESTRAR TODOS SUS PRODUCTOS

Una intervención al estilo Metropolitana

En Pompeya, luego de que la Metropolitana secuestrara productos de dos viviendas, hubo refriegas con los vendedores ambulantes y gases lacrimógenos y pimienta. La policía dijo que eran productos truchados. Los vendedores denuncian persecución.

Puesteros del barrio de Pompeya y agentes de la Policía Metropolitana mantuvieron un enfrentamiento durante la mañana de ayer, luego de que los efectivos de la fuerza porteña allanaran dos depósitos de mercadería supuestamente ilegal. Los vendedores atacaron con piedras, mientras que desde la Metropolitana utilizaron gases lacrimógenos como método de trabajo. A modo de protesta por perder sus productos, los trabajadores callejeros cortaron durante el mediodía la avenida Sáenz mano a provincia. Una mujer denunció que el operativo policial formó parte de una “persecución a la gente que labura en la calle”.

A partir de una orden del juez Carlos Aostri, del Juzgado de Instrucción 19 en lo Penal, Contravencional y de Faltas, se allanaron dos viviendas, una ubicada en Lebensohn 943, y otra en Sáenz y Amancio Alcorta, en el marco de una investigación sobre “actividades de una organización destinada a la venta ilegal de mercadería en la zona sur de la Ciudad”. El operativo arrancó alrededor de las 7.30, momento en que los puesteros pasaban a retirar la mercadería para vender. Según explicó Marina, una vendedora, a Página/12, los puesteros suelen pagar “siete pesos para guardar los productos” en estos lugares, debido a que muchos viven en zonas alejadas y dicen que en los colectivos no pueden llevar esa carga.

A partir del encontronazo entre trabajadores callejeros y policías comenzaron los insultos, gritos y por momentos agresiones. Un joven puestero terminó con “un corte en la cara”, producto del impacto de un proyectil de “gas pimienta”, indicó José Basilio, vendedor callejero.

Del lado de la Metropolitana dos móviles terminaron con los vidrios rotos. Ante la pérdida de su mercadería, los trabajadores, en su mayoría de la plazoleta que está en la esquina de Traful y avenida Sáenz, decidieron cortar esa vía de circulación en su mano a provincia. El corte duró desde pasada la media mañana hasta poco antes de las 14. De no recuperar hoy sus productos para vender, los vendedores anunciaron a este diario que al mediodía interrumpirán de nuevo el tránsito. “Somos 30 familias que necesitan esos productos para mantenerse”, sostuvo Basilio.

Según un oficial se secuestraron “120 bultos con indumentaria, calzado, juguetes, CD y DVD falsos”. Por su parte, los puesteros dijeron que “no había testigos” cuando la Metropolitana se llevó los productos y que “no dejaron que nadie viera cuánto era lo secuestrado”.

“Creemos que esto es una persecución a la gente que labura en la calle”, apuntó una vendedora. Los puesteros aseguran que padecen de forma habitual el cobro de coimas por parte de la Policía Federal para poder vender en la calle, debido a la irregular situación legal que atraviesan. Esta fragilidad laboral los lleva, como en el caso de un joven puestero, a pensar en el mal menor: “Prefiero a la Federal que te cobra para trabajar, pero cuando viene la Metropolitana se lleva todo”.

Informe: Leonardo Rossi.

Compartir: 

Twitter

Después de los enfrentamientos, los bomberos ponen agua fría al incendio y a los reclamos de los puesteros.
Imagen: DyN
 
SOCIEDAD
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.