El tifón Talas, que afecta el sudeste de Japón, provocó al menos 20 muertos y dejó más de 50 personas desaparecidas, según reportaron las autoridades locales. Ante este cuadro, los gobernantes dispusieron la evacuación de unas 500 mil personas, en zonas del oeste y centro del país. Talas, el duodécimo tifón de la temporada, entró por la isla sudoccidental de Shikoku y se dirige lentamente hacia el norte. Las lluvias torrenciales y vientos de hasta 108 kilómetros causaron que numerosas viviendas quedaran inundadas y unos 40 mil edificios perdieran el servicio de electricidad. En la provincia de Wakayama, rescatistas buscaban a dos niños y tres mujeres, mientras que una niña fue sacada viva de entre los escombros.