Cuatro líneas de subterráneos de la ciudad de Buenos Aires sufrieron ayer diversas interrupciones en sus servicios y generaron complicaciones durante la mañana. El caso más insólito se produjo en la línea B, cuando un perro que caminaba con tranquilidad en las vías obligó al maquinista a adecuar la velocidad del subte al paso canino, lo que originó importantes demoras. La línea D tuvo que suspender durante media hora el recorrido en sentido a Congreso de Tucumán debido a que un trabajador despedido se arrojó a las vías de la estación Callao, para reclamar su reincorporación. El empleado protestó desde las 6.50 hasta las 7.05, cuando decidió levantar la medida. Según dijo, fue acusado falsamente de robar 36.000 pesos cuando trabajaba en la boletería de Metrovías. El servicio en la línea D se reanudó a las 7.09. Por su parte, la línea C, que une las terminales Retiro y Constitución, estuvo interrumpida y limitada entre las 10 y las 11 en su servicio por la presencia de humo en un túnel entre las estaciones San Martín y Lavalle. Finalmente y tras la interrupción primero y la circulación limitada entre las estaciones Constitución y Diagonal Norte después, el servicio quedó normalizado a las 11. Más temprano, la línea A se vio interrumpida en todo su recorrido, desde Plaza de Mayo a Carabobo, entre las 5.04 y las 5.47.