SOCIEDAD › DEBATE MUNDIAL POR EL PRIMER OBISPO HOMOSEXUAL
Cumbre anglicana sobre gays
La Iglesia Anglicana llamó a una reunión extraordinaria por la polémica elección del reverendo gay. Hay amenaza de cisma.
La designación del primer reverendo gay cayó como una bomba en la Iglesia Anglicana. A tal punto que ayer el arzobispo de Canterbury, su máximo jefe espiritual, convocó a una cumbre extraordinaria de obispos anglicanos para octubre para debatir acerca de la homosexualidad en esa religión, que agrupa a 80 millones de fieles. La semana próxima, Rowan Williams comenzará a enviar las invitaciones formales a los 38 arzobispos anglicanos repartidos en todo el mundo. Algunos obispos pronostican un cisma.
“Tengo claro que la ansiedad causada por los acontecimientos recientes nos ha llevado a un punto en el que necesitamos sentarnos y discutir sus consecuencias”, dijo Williams, en referencia al nombramiento de Gene Robinson. El miércoles pasado, el reverendo Robinson, de 56 años, fue designado en una elección con 62 votos a favor y 45 en contra como obispo episcopaliano (como se denomina al anglicanismo en Estados Unidos) de New Hampshire, Estados Unidos. De esta forma se convirtió en el primer obispo homosexual de la Iglesia Anglicana. Los sectores más tradicionalistas del anglicanismo condenaron duramente la elección, que amenaza con provocar una ruptura en la jerarquía anglicana. “Esta catastrófica decisión no debe transformarse en una aberración excepcional, debe ser una ocasión para que los anglicanos bíblicos de todo el mundo tomen una decisión, que sin duda desembocará en un reajuste importante de las relaciones en nuestra comunidad”, sostuvo el obispo de Sydney, Australia, Peter Jensen, conocido dentro de la Iglesia Anglicana por su conservadurismo.
Robinson, que convive desde hace 13 años con su pareja y es padre divorciado de dos niños, habló en la televisión estadounidense y se mostró confiado en que el ejemplo de los episcopalianos se difunda entre otras confesiones religiosas: “Supongo que dentro de poco seguirán otras iglesias y recibirán abiertamente a homosexuales y lesbianas en el seno de sus jerarquías. Es mi plegaria”, manifestó.
Algunos obispos anglicanos sostuvieron que la designación de Robinson “es contraria al espíritu de las Santas Escrituras” y que “legitima injustamente la condición homosexual”, y mientras Williams había reconocido que “se avecinan tiempos difíciles”, el obispo de Sydney pronosticó que habrá “un cisma en el anglicanismo mundial”. Durante la votación, 24 obispos conservadores de Estados Unidos habían amenazado con abandonar la Iglesia; el anuncio podría concretarse en una reunión que se realizará en octubre en Texas.
Sin embargo, ayer se avanzó un paso más en la incorporación de los homosexuales al anglicanismo cuando una congregación de sacerdotes y laicos de Estados Unidos reconoció las uniones del mismo sexo en una decisión que tuvo 120 votos a favor y 72 en contra.
Robinson fue designado un mes después de que Jeffrey John, otro reverendo homosexual, declinara su nombramiento como obispo anglicano de Reading, una ciudad al oeste de Londres. John había justificado su decisión para evitar “perjuicios que habrían podido afectar a la unidad de la Iglesia”. En aquella oportunidad, el arzobispo de Nigeria había amenazado con distanciarse junto con 17 millones de fieles africanos.