SOCIEDAD › CAMBIOS EN LAS FARMACIAS TRAS LA LEY DE GENERICOS
Pacientes como consumidores
Por P. L.
Los farmacéuticos salieron a apostar fuerte: “Nuestro rol cambió”, afirma uno de sus máximos representantes. La Ley de Genéricos, sostienen, les devolvió una función profesional, y afirman su disposición no sólo a dispensar sino a efectuar el seguimiento de los efectos de los remedios que suministran. Además, “el farmacéutico puede tener el deber de dialogar con el médico tratante”. Su disposición a actualizarse incluye “la posibilidad de hacernos cargo del dispendio de marihuana, llegado el caso de que la ley lo autorice”. La cannabis podría expenderse en pulverizadores o en saquitos para té.
“Antes, los pacientes pedían una marca de medicamento; ahora, preguntan por el genérico y consultan por alternativas económicas”, señaló Marcelo Peretta, presidente del Colegio de Farmacéuticos porteño y vicepresidente de la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA). A partir de esto, “el rol del farmacéutico cambió: sentimos la responsabilidad ética de ofrecer distintas alternativas; muchas veces vemos que el paciente no tiene dinero para iniciar o continuar su tratamiento. Según el representante de los farmacéuticos, la Ley de Genéricos “nos devolvió un rol profesional, nos jerarquizó. Pero eso nos plantea nuevas responsabilidades, incluso las que derivan de la Ley 22.240 del Consumidor: si un paciente entiende que no recibió adecuada información sobre medicamentos más baratos o efectos secundarios, puede reclamar en Defensa del Consumidor”.
Las obligaciones del farmacéutico incluyen “aclarar dudas sobre efectos adversos de los medicamentos, ya que a la gente no siempre le resulta claro cómo interpretar las advertencias de los prospectos. También forma parte de nuestro trabajo el seguimiento de los eventuales efectos adversos”. Es más, “el farmacéutico puede tener el deber profesional de dialogar con el médico: ‘Tal vez esa prescripción podría cambiarse, doctor, porque este paciente es alérgico, mire que yo lo conozco...’”.
Peretta precisó que “a partir de la Ley de Prescripción por Genéricos la presencia de los farmacéuticos en las farmacias porteñas está en el 92 o 95 por ciento. Antes, no subía del 60 por ciento; era común que se limitaran a firmar. La Ciudad de Buenos Aires era el distrito más problemático en este sentido, porque en localidades más pequeñas es más común que el farmacéutico atienda personalmente”.
Pero, ¿cómo saber quién es el farmacéutico? “La COFA preparó credenciales con fotografía que llevarán obligatoriamente en la chaquetilla todos los farmacéuticos del país. Nosotros pedimos que la gente pregunte por el farmacéutico.”
Peretta también comentó la posibilidad de la legalización del uso medicinal de cannabis: “Si el Ministerio de Salud llegase a aprobarla para su uso terapéutico (hay un proyecto de ley en ese sentido presentado por la diputada Irma Parentella), los farmacéuticos vamos a acompañar, ya que deberemos hacernos cargo de su dispendio”. El farmacéutico anticipó que “la cannabis podría expenderse en saquitos, que la dosificarían para prepararla como infusión, o en pulverizadores para inhalar, como los que se usan para enfermedades de las vías respiratorias. En ningún caso se vendería la hierba para ser fumada, por los efectos tóxicos de esta forma de administración”.