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Buenos Aires vivió ayer el día más caluroso del verano. La sensación térmica llegó a 37 grados y obligó a la gente a refugiarse en lugares atípicos. Sandra y sus cinco hermanitos coparon desde temprano la fuente de la plaza del Congreso. No muy lejos, Mario decidió no compartir con nadie la pequeña fuente de Perú e Hipólito Yrigoyen, que se convirtió en su “pileta de agua calentita”. Las ventas de helados, botellas de agua mineral y de gaseosas frescas estuvieron a la orden del día. Para otros, el aire acondicionado de los shoppings se convirtió en paliativo para el intenso calor: durante el mediodía tres mil personas por hora ingresaron a Galerías Pacífico. Según el Servicio Meteorológico Nacional, el fenómeno persistirá hasta el jueves en el área metropolitana. En cambio, en la costa atlántica a partir de hoy habrá lluvias y tormentas aisladas.
Para taxistas y motoqueros el día fue infernal. “Decidí irme a mi casa al mediodía y retomé por la tarde porque no aguantaba el calor”, contó un taxista, mientras un hilo de sudor le corría por la cara. Los porteños sufrieron ayer el día más caluroso del año, con una temperatura máxima que marcó 36,9 grados a las 15.10 horas. Y la sensación térmica trepó a 37 grados entre las 15 y 16, con una humedad de 28 por ciento.
La temperatura máxima promedio de enero es de 29,9. “Hasta ahora la temperatura del mes está dentro de los valores normales. Siempre en enero hay algunos días con temperaturas superiores a 34 grados”, informó a Página/12 la pronosticadora Marta Fernández, del Servicio Meteorológico Nacional.
El fenómeno comenzó el domingo con una temperatura de 34,5 grados en Capital Federal y Gran Buenos Aires y durará hasta el jueves: hoy se estima que los termómetros llegarán a 34 grados, mañana y el jueves a 32, mientras que el viernes descenderán a 30, con presencia de nubosidades variables. “Posiblemente el tiempo desmejore el fin de semana”, vaticinó el pronosticador de turno, Claudio Castro.
“No se trata de una ola de calor”, aclaró Castro. Para ello, se deben reunir una serie de parámetros: durante 8 días consecutivos, la temperatura no debe ser menor a 38 grados y la humedad debe oscilar entre 60 y 90 por ciento.
El fenómeno se extendió desde el centro hacia el norte del país con temperaturas que no bajaron de 30 grados. La temperatura más elevada se registró en La Rioja, donde la máxima llegó a 37,7 grados. En Mar del Plata, la temperatura máxima llegó a 34,3 y la mínima a 14,8. Sin embargo, el tiempo desmejorará a partir de hoy ya que se pronostica probabilidad de lluvias y tormentas aisladas hasta el fin de semana.
En cuanto a los registros históricos, para Buenos Aires, la temperatura más alta fue de 43,3, el 29 de enero de 1957. El 21 de enero de ese mismo año se registró la sensación térmica más alta que llegó a 55 grados.
“Con temperaturas tan altas la gente se tiene que cuidar porque pueden producir efectos nocivos graves. Hay que tomar mucha agua, comer alimentos salados y usar ropa clara”, recomendó Fernández.
Informe: Silvia Marchant.