SOCIEDAD › ABRAHAM KAUL, AL CONMEMORAR EL 110º ANIVERSARIO DE LA AMIA
“La bomba tapó el rol de cien años”
El presidente de la AMIA repasa los logros de la entidad “madre” de la vida comunitaria judía en la Argentina. Respecto del juicio, dice que “no estamos esperando un fallo político sino ecuánime”.
Prefiere hablar de conmemoración y no de festejos, dice Abraham Kaul, presidente de la AMIA. La entidad cumple 110 años y comienza a recordarlos hoy con una velada artística en el Teatro Colón en la que actuarán Maximiliano Guerra y el Ballet del Mercosur. De alguna forma, se trata de la retrasada celebración del centenario de la mutual, interrumpida brutalmente por el sangriento atentado contra su edificio de la calle Pasteur. El aniversario –advierte Kaul– encuentra a la comunidad judía con el temor por un tercer atentado. “No digo que sea algo que pueda ocurrir ya, pero sí que puede ocurrir. No nos olvidemos de que los atentados fueron traídos por el terrorismo internacional y que seguimos siendo un país muy grande, con fronteras muy amplias, con muy pocos pasos fronterizos informatizados y que es muy fácil cruzar las fronteras”, señaló a Página/12, en la que consideró que Brasil “ha adoptado una actitud muy enérgica” contra el terrorismo, a diferencia del gobierno argentino que en ese sentido –opinó– tiene “mucho por hacer”.
El inicio de los actos por la conmemoración de los 110 años se produce a días de conocerse el fallo del juicio oral contra los acusados de integrar la conexión local del atentado de 1994 contra la AMIA. “No existe en el ánimo de la comunidad judía y de la AMIA ejercer algún tipo de presión sobre los jueces. No estamos esperando fallos políticos, sino que después de tres años en los que tomaron más de 1300 testimonios, los jueces tengan la claridad suficiente para sacar una sentencia justa, ecuánime y que nos dé respuestas que hoy no tenemos. Si hay culpables, que paguen, si hay inocentes, que salgan en libertad”, dijo el titular de la AMIA y recordó que los últimos diez años a la espera de justicia “han tapado el rol de la AMIA de más de cien años”, central en el desarrollo educativo, religioso, cultural y social de la comunidad judía.
La entidad entrega subsidios económicos para alimentos, medicamentos, vestimenta y vivienda, y brinda sustento económico a escuelas de la Red Escolar Judía. Al mismo tiempo diseñó el armado de una importante red de ayuda social a sus miembros más necesitados y además la red de empleo más grande del país, abierta a toda la sociedad, que cuenta con 95.000 inscriptos.
La inseguridad, tema candente por estos días en la agenda política, tiene otra magnitud para la comunidad judía, señaló Kaul: “Nosotros estamos afectados por la inseguridad por tener que vivir en nuestras instituciones con los pilotes. Nuestra preocupación hoy pasa por ver cómo desde las instancias centrales del país se puede evitar que no ocurra un tercer atentado”, indicó.
–¿Considera que todavía está latente el riesgo de otro atentado?
–No digo que sea algo que pueda ocurrir ya, pero sí que puede ocurrir. No nos olvidemos de que los atentados fueron traídos por el terrorismo internacional y que seguimos siendo un país muy grande, con fronteras muy amplias, con muy pocos pasos fronterizos informatizados y que es muy fácil cruzar las fronteras. El año pasado hubo un alerta nacional, que yo recuerde era el primero que se producía. Hay un mayor cuidado, pero creo que hay que trabajar un poco más. La inseguridad fundamental es la de poder vivir tranquilamente en nuestras instituciones y no lo podemos hacer. Ya está incorporado: cuando uno ingresa a una institución judía sabe que puede ocurrir un atentado. Los pilotes no están de adorno.
La AMIA es considerada como la “institución madre” y centro de la vida organizada de la comunidad judía en la Argentina, generadora además de otras iniciativas comunitarias como el Consejo Central de la Educación Judía, la Federación de Comunidades Judías de la Argentina y la Fundación Tzedaká, entre otras. También participa con organizaciones de la sociedad civil en marcos como la Mesa del Diálogo Argentino, el Foro del Sector Social, la Mesa de Organizaciones para la Discapacidad “para la presentación de nuevas propuestas de cambios sociales y políticos”.
Entre los logros, la entidad enumera las más de 35 mil personas que asisten a las actividades culturales gratuitas por año.